Especie de protozoo parásito que produce ENTAMOEBIASIS y disentería amebiana (DISENTERIA, AMEBIANA). Entre sus características se incluyen poseer un sólo núcleo que contiene un cariosoma pequeño central y cromatina periférica que está fina y regularmente granulada.
Género de protozoos ameboides caracterizados por la presencia de cromatina granulada sobre la superficie interna de la membrana nuclear. Sus organismos son parásitos en invertebrados y vertebrados, incluidos los humanos.
Infección con ameba del género ENTAMOEBA. La infección con E. histolytica produce la DISENTERÍA, AMEBIANA y el ABSCESO HEPÁTICO AMEBIANO.
DISENTERÍA causada por una infección intestinal amebiana, sobre todo por ENTAMOEBA HISTOLYTICA. Esta afección puede asociarse con la infección amebiana del HÍGADO y de otros sitios distantes.
Áreas únicas o múltiples de PUS debidas a infección por algún protozoo ameboide (AMEBIASIS). Una forma común es la causada por la ingestión de ENTAMOEBA HISTOLYTICA.
Células o forma vegetativa del ciclo vital de los protozoos esporozoarios. En el parásito de la malaria, el trofozoíto se desarrolla a partir del MEROZOÍTO y luego se divide formando el ESQUIZONTE. Los trofozoítos que no han sufrido división celular pueden formar gametocitos.
Agentes que destruyen las amebas, especialmente las especies parasitarias que producen AMEBIASIS en hombres y animales.
Infección con cualquiera de las diversas amebas. Es un estado de portador asintomático en la mayoría de los individuos, pero pueden ocurrir enfermedades que van desde la diarrea crónica leve a la disentería fulminante.
Infecciones de los INTESTINOS por PARÁSITOS, comúnmente con GUSANOS PARÁSITOS. Las infecciones por lombrices (INFECCIONES POR NEMATODOS) y tenias (INFECCIONES POR CESTODOS) también se conocen como HELMINTIASIS.
Infecciones por organismos unicelulares del subreino Protozoa.
Proteínas que se encuentran en cualquier especie de protozoo.
Ácido desoxirribonucleico que constituye el material genético de los protozoos.
Residuo o excremento del tracto digestivo formado en el intestino y expulsado por recto. Las heces están compuestas por agua, residuos alimenticios, bacterias y secreciones del intestino y del hígado. (Diccionario Mosby. 5a ed. Madrid: Harcourt España, 2000, p.615).
Especie de parásitos EUCARIOTAS que se une a la mucosa intestinal y se alimenta de las secreciones mucosas. El organismo tiene, aproximadamente, forma de pera y motilidad algo errática, con lentas oscilaciones alrededor del eje longitudinal.
Estudio de los parásitos y ENFERMEDADES PARASITARIAS.
Cualquier parte o derivado de cualquier protozoo que desencadena la inmunidad; los antígenos de la malaria (Plasmodium) y del tripanosoma son en la actualidad los que se encuentran con mayor frecuencia.
Género de protozoos ameboides que se encuentra en los intestinos de vertebrados e invertebrados.
Género de parásitos flagelados EUCARIOTAS que se distinguen por la presencia de cuatro flagelos anteriores, una membrana ondulante, y un flagelo que se arrastra.
Una subclase de péptido hidrolasas que dependen de un residuo de CISTEÍNA para su actividad.
Complemento genético completo contenido en un conjunto de CROMOSOMAS de un protozoo.
Inmunoglobulinas producidas en una respuesta a ANTÍGENOS DE PROTOZOOS.
Especie de protozoos parásitos que se encuentran en el intestino de los humanos y de otros primates. Se clasificó como levadura en 1912. Al pasar los años, surgieron preguntas acerca de su designación. En 1967, muchas características fisiológicas y morfológicas del B. hominis se reportaron que encajaban más con un la clasificación de un protozoo. Desde entonces, otros trabajos han corroborado a este trabajo y el organismo es reconocido actualmente como protozoo parásito en humanos que produce una enfermedad intestinal con síntomas potencialmente incapacitantes.
Unidades hereditarias funcionales de protozoos.
Proteinas que tienen la característica común de unirse a los carbohidratos. Algunos ANTICUERPOS y proteinas matabolizadoras de carbohidratos (ENZIMAS)también se unen a los carbohidratos, aunque sin embargo no se consideran como lectinas. Las LECTINAS DE PLANTAS son proteinas unidas a carbohidratos que han sido primariamente identificadas por su actividad hemaglutinante (HEMAGLUTININAS). Sin embargo, en las especies animales hay una variedad de lectinas que tienen diversas funciones a partir del reconocimiento de carbohidratos específicos.
El derivado N-acetil de la galactosamina.
Género de parásitos EUCARIOTAS intestinales flagelados de varios vertebrados, incluido el hombre. Entre sus características se incluye la presencia de cuatro pares de flagelos que surgen de un sistema complicado de axonemos y quistes que son de forma elipsoidal u ovoide.
Género de EUCARIOTAS pequeños que se caracterizan por la preponderancia de formas binucleadas sobre las uninucleadas, la presencia de gránulos distintivos en el cariosoma y la ausencia de etapa quística. Es parásito en el intestino delgado de humanos y de ciertos monos.
Organismos invertebrados que viven sobre un organismo o dentro de él (huésped) y se benefician del otro. Tradicionalmente se excluyen de la definición de parásitos a las BACTERIAS, HONGOS, VIRUS y PLANTAS patógenas, aunque puedan vivir de manera parasitaria.
Sustancias que destruyen a los protozoos.
Infección del INTESTINO DELGADO producida por el protozoo flagelado GIARDIA LAMBLIA. Se disemina por medio de alimentos contaminados y del agua y por el contacto directo de persona a persona.
Un nitroimidazol utilizado en el tratamiento de la AMEBIASIS, TROCOMONIASIS, GIARDIASIS, infecciones por BACTERIAS ANAEROBIAS e INFECCIONES POR TREPONEMA. Se ha propuesto como un sensibilizador a la radiación para células hipóxicas. De acuerdo al Cuarto Informe Anual sobre Carcinógenos (NTP 85-002, 1985, p133), puede anticiparse, de manera razonable, que esta sustancia sea un carcinógeno (Adaptación del original: Merck, 11th ed).
Descripciones de secuencias específicas de aminoácidos, carbohidratos o nucleótidos que han aparecido en lpublicaciones y/o están incluidas y actualizadas en bancos de datos como el GENBANK, el Laboratorio Europeo de Biología Molecular (EMBL), la Fundación Nacional de Investigación Biomédica (NBRF) u otros archivos de secuencias.
Subfamilia de los Muridae constituida por varios géneros incluidos Gerbillus, Rhombomys, Tatera, Meriones, y Psammomys.
Estadio vegetativo en el ciclo vital de los protozoos esporozoarios. Es característico de los miembros de los filos APICOMPLEXA y MICROSPORIDIOS.
Infestaciones con lombrices parásitas de la clase helmintos.
Tri-benceno-amonio generalmente combinado con cloruro de zinc. Es utilizado como colorante biológico y para la tinción e impresión de textiles.
Ácido ribonucleico de protozoos que desempeña funciones reguladoras y catalíticas así como participa en la síntesis de proteínas.
Uno de los tres dominios de la vida (los otros son BACTERIAS y ARCHAEA), también llamado de Eukarya. Son organismos cuyas células están envueltas en membranas y poseen un núcleo. Comprenden casi todos los organismos unicelulares y muchos organismos pluricelulares. Tradicionalmente se dividen en grupos (a veces llamados reinos), incluyendo ANIMALES, PLANTAS, HONGOS, diferentes algas, y otros taxones que anteriormente formaban parte del antiguo reino Protista.
Conocidos comúnmente como lombrices parasitarias, este grupo incluye los ACANTOCÉFALOS, NEMÁTODOS, y PLATELMINTOS. Algunos autores consideran como helmintos a ciertas especies de SANGUIJUELAS que pueden temporalmente convertirse en parásitos.
Fármacos que se usan para tratar las infecciones por tricomonas.
Una aldohexosa que se presenta naturalmente en la forma D en la lactosa, cerebrósidos, gangliósidos, y mucoproteínas. La deficiencia de galactosil-1-fosfouridiltransferasa (ENFERMEDAD POR DEFICIENCIA DE GALACTOSA-1-FOSFOURIDILTRANSFERASA) causa un error en el metabolismo de la galactosa denominado GALACTOSEMIA, que provoca elevación de los niveles de galactosa en la sangre.
Método in vitro para producir grandes cantidades de fragmentos específicos de ADN o ARN de longitud y secuencia definidas a partir de pequeñas cantidades de cortas secuencias flanqueadoras oligonucleótidas (primers). Los pasos esenciales incluyen desnaturalización termal de las moléculas diana de doble cadena, reasociación de los primers con sus secuencias complementarias, y extensión de los primers reasociados mediante síntesis enzimática con ADN polimerasa. La reacción es eficiente, específica y extremadamente sensible. Entre los usos de la reacción está el diagnóstico de enfermedades, detección de patógenos difíciles de aislar, análisis de mutaciones, pruebas genéticas, secuenciación del ADN y el análisis de relaciones evolutivas.
El orden de los aminoácidos tal y como se presentan en una cadena polipeptídica. Se le conoce como la estructura primaria de las proteínas. Es de fundamental importancia para determinar la CONFORMACION PROTÉICA.
Suspensiones de protozoos atenuados o muertos administrados para la prevención o el tratamiento de enfermedades infecciosas producidas por protozoos.
Colecciones solitarias o múltiples de PUS dentro del hígado como resultado de infección por bacterias, protozoos u otros agentes.
Tipo de lectinas de animales con afinidad por el beta-galactósido con independencia del calcio. Los miembros de esta clase se diferencian de otras lectinas por la presencia de un dominio conservado de reconocimiento de carbohidratos. La mayoría de las proteínas de este grupo se unen a moléculas de azucar en un proceso dependiente del sulfhidrilo, por lo que suele hablarse de lectinas tipo S, si bien esta propiedad no es imprescindible para pertenecer a este grupo.
Propiedad de la superficie de un objeto que hace que se pegue a otra superficie.
Polisacárido lineal de unidades de ACETILGLUCOSAMINA unidas entre sí por enlaces beta-1,4. Es el segundo biopolímero más abundante en la tierra y se encuentra sobre todo en INSECTOS y HONGOS. Al desacetilarse se le denomina QUITOSANA.
Enzima que cataliza la conversión de L-SERINA a COENZIMA A y O-acetil-L-serina, utilizando ACETIL-COA como donante.

'Entamoeba histolytica' es un protozoo patógeno que causa la amebiasis, una infección intestinal. Se trata de un parásito que vive en el tracto digestivo humano y se encuentra comúnmente en ambientes con saneamiento deficiente y falta de acceso al agua potable segura.

La especie Entamoeba histolytica tiene dos formas: la forma vegetativa o trofozoito y la forma quística. Los trofozoitos son los parásitos activos que se reproducen y causan daño a las células del huésped, mientras que los quistes son formas inactivas y resistentes que se eliminan con las heces y pueden sobrevivir en el medio ambiente durante semanas o incluso meses.

La infección por E. histolytica puede causar diversos síntomas, desde diarrea leve hasta disentería severa con sangre y moco en las heces. En algunos casos, la infección puede diseminarse más allá del intestino y causar abscesos amebianos en el hígado u otros órganos.

Es importante destacar que no todas las personas infectadas con E. histolytica desarrollan síntomas, y algunas pueden ser portadoras asintomáticas del parásito. Sin embargo, incluso sin presentar síntomas, estas personas pueden transmitir la infección a otras a través de los quistes eliminados en las heces.

Entamoeba es un género de protistas que incluye varias especies parasitarias, la más común y significativa desde el punto de vista médico es Entamoeba histolytica. Este protozoo parásito es el agente etiológico de la amebiasis, una enfermedad intestinal que afecta al ser humano y otros primates.

Esta infección puede cursar de forma asintomática o provocar diversos síntomas como diarrea, disentería (diarrea con moco y sangre), dolor abdominal, fiebre y, en casos más graves, perforación intestinal o desarrollo de abscesos hepáticos amebianos.

La transmisión de Entamoeba histolytica se produce principalmente a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con quistes, la forma infectante del parásito. Una vez inside el organismo, los quistes se transforman en trofozoítos, formas móviles y feeding que se adhieren a la mucosa intestinal y liberan enzimas líticas que les permiten invadir los tejidos y causar daño tisular.

El diagnóstico de la amebiasis se realiza mediante el examen microscópico de heces, donde se observan quistes o trofozoítos, y pruebas serológicas que detectan anticuerpos específicos frente a Entamoeba histolytica. El tratamiento suele incluir la administración de agentes antiparasitarios como metronidazol, tinidazol o iodoquinol, junto con medidas de rehidratación y control de los síntomas.

La entamebiasis es una infección parasitaria causada por el protozoo Entamoeba histolytica. Este parásito puede invadir la mucosa intestinal y provocar diversos síntomas, que van desde diarrea leve hasta disentería severa con sangre y moco en las heces. En casos graves, el parásito puede disseminar a otros órganos fuera del sistema gastrointestinal, como el hígado, causando abscesos amebianos.

La transmisión de la entamebiasis generalmente ocurre a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con quistes de E. histolytica. Los síntomas suelen aparecer después de una incubación de varias semanas, pero algunas personas pueden ser portadoras asintomáticas del parásito. El diagnóstico se realiza mediante examen microscópico de las heces para detectar quistes o trofozoítos de E. histolytica, aunque pruebas más específicas como PCR o antígenos pueden ser necesarias en algunos casos.

El tratamiento de la entamebiasis suele implicar el uso de fármacos antiprotozoarios, como metronidazol, tinidazol o secnidazol, que son eficaces para eliminar las formas invasivas del parásito. Después del tratamiento con estos medicamentos, se recomienda el uso de agentes luminales, como iodoquinol o diloxanida, para erradicar los quistes y prevenir la transmisión. Además, es fundamental adoptar medidas preventivas, como el lavado adecuado de las manos y la mejora de la higiene del agua y los alimentos, para reducir el riesgo de infección por E. histolytica.

La disentería amebiana es una enfermedad infecciosa del tracto gastrointestinal causada por el parásito protozoario Entamoeba histolytica. La infección se adquiere generalmente a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con cisticos de E. histolytica.

La enfermedad se caracteriza por diarrea acuosa con moco y sangre, dolor abdominal, calambres y, a veces, fiebre. En casos graves, puede haber disfunción intestinal grave e incluso perforación intestinal. La disentería amebiana es más común en regiones con saneamiento deficiente y falta de acceso al agua potable segura.

El diagnóstico se realiza mediante el examen de heces para detectar quistes o trofozoitos de E. histolytica. El tratamiento implica el uso de fármacos antiprotozoarios específicos, como metronidazol, tinidazol o iodoquinol, y a veces también se requiere rehidratación y manejo de síntomas. La prevención incluye la mejora del saneamiento básico, el acceso al agua potable segura y la educación sobre prácticas adecuadas de higiene alimentaria y personal.

Un absceso hepático amebiano es una complicación médica causada por la invasión y destrucción de tejidos del parásito Entamoeba histolytica en el hígado. Este parásito normalmente vive en el intestino, pero en algunos casos puede invadir los tejidos circundantes y causar infecciones graves.

El absceso hepático amebiano se presenta como una masa dolorosa y suave en el hígado, llena de pus. Los síntomas pueden incluir fiebre alta, dolor abdominal intenso, náuseas, vómitos, pérdida de apetito y sudoración excesiva. En casos graves, el paciente puede presentar ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos) y anemia.

El diagnóstico se realiza mediante pruebas de imagenología como ecografías o tomografías computarizadas, así como análisis de sangre y heces para detectar la presencia del parásito. El tratamiento suele incluir medicamentos antibióticos y antiamebianos, así como drenaje quirúrgico del absceso en casos graves o cuando no responde al tratamiento médico.

Es importante mencionar que la infección por Entamoeba histolytica se adquiere principalmente a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con heces humanas, especialmente en países en desarrollo con malas condiciones sanitarias. Por lo tanto, es fundamental mantener una buena higiene personal y alimentaria para prevenir esta infección.

Los trofozoítos son etapas de desarrollo de protozoos, un tipo de protistas unicelulares. Se refiere específicamente a la forma vegetativa activa y feeding de estos organismos. Durante esta fase, el trofozoito se mueve, consume nutrientes y se reproduce asexualmente por medio de fisión binaria. Algunos ejemplos de protozoos que presentan etapas trofozoíticas incluyen Giardia lamblia, un parásito intestinal que causa giardiasis, y Entamoeba histolytica, un agente patógeno que provoca amebiasis.

Los amebicidas son un grupo de fármacos utilizados para tratar infecciones causadas por protozoarios, específicamente por la ameba Entamoeba histolytica. Estas infecciones pueden manifestarse como disentería amebiana o amebiasis extraintestinal, que incluye abscesos hepáticos amebianos.

Algunos ejemplos comunes de amebicidas incluyen:

1. Metronidazol: Es el fármaco de primera línea para tratar la disentería amebiana y los abscesos hepáticos amebianos. Se administra por vía oral o intravenosa, según la gravedad de la infección.
2. Tinidazol: Es un agente antiamebiano similar al metronidazol, pero con una vida media más larga y una sola dosis puede ser suficiente para tratar la disentería amebiana leve a moderada.
3. Paromomicina: Se utiliza como un agente de segunda línea para tratar la disentería amebiana y se administra por vía oral. Es menos eficaz que el metronidazol o el tinidazol contra los abscesos hepáticos amebianos.
4. Diloxanida furoato: También se utiliza como un agente de segunda línea para tratar la disentería amebiana y se administra por vía oral. Se usa a menudo en combinación con otros amebicidas para garantizar la erradicación completa de la infección.
5. Iodoquinol: Es un agente antiamebiano que se utiliza para tratar la disentería amebiana y las infecciones intestinales asintomáticas causadas por E. histolytica. Se administra por vía oral.

Es importante recalcar que el tratamiento con amebicidas debe ser supervisado por un profesional médico, ya que cada fármaco tiene sus propias indicaciones, contraindicaciones y efectos secundarios. Además, es fundamental completar el curso completo del tratamiento para garantizar la erradicación completa de la infección y prevenir la resistencia a los medicamentos.

La amebiasis es una infección intestinal causada por un parásito protozoario llamado Entamoeba histolytica. Este parásito se encuentra principalmente en aguas contaminadas y alimentos mal cocidos, especialmente en regiones con condiciones sanitarias deficientes.

La amebiasis puede presentarse de dos maneras: asintomática o invasiva. En la forma asintomática, el parásito vive en el intestino grueso sin causar daño y el individuo infectado no presenta síntomas. Sin embargo, en la forma invasiva, el parásito invade los tejidos del intestino, lo que puede provocar diarrea líquida con sangre y moco (disentería amebiana), dolor abdominal, fiebre y malestar general. En casos graves, la infección puede diseminarse más allá del intestino e infectar otros órganos, como el hígado, lo que puede causar abscesos hepáticos amebianos.

El diagnóstico de la amebiasis se realiza mediante exámenes de heces para detectar el parásito o sus quistes. En algunos casos, pueden ser necesarias pruebas adicionales, como biopsias o ecografías, para confirmar la infección y determinar su gravedad.

El tratamiento de la amebiasis depende de la gravedad de los síntomas y del alcance de la infección. En casos leves, el tratamiento puede consistir en medicamentos antiprotozoarios que eliminan el parásito del intestino. En casos más graves, pueden ser necesarios antibióticos adicionales para tratar las complicaciones y prevenir la diseminación de la infección.

La prevención de la amebiasis implica medidas higiénicas básicas, como lavarse las manos con frecuencia, especialmente después de usar el baño o antes de comer, y evitar el consumo de agua o alimentos contaminados. La cocción adecuada de los alimentos y la pasteurización del agua también pueden ayudar a prevenir la infección.

La parasitosis intestinal se refiere a la infección o infestación del sistema gastrointestinal por parásitos, organismos que viven y se alimentan en el cuerpo humano a expensas de su huésped. Estos parásitos pueden ser protozoarios (como Giardia, Cryptosporidium, Entamoeba histolytica) o helmintos (como Ascaris lumbricoides, Trichuris trichiura, Ancylostoma duodenale, Necator americanus, Schistosoma mansoni).

La parasitosis intestinal puede causar una variedad de síntomas, que incluyen diarrea, dolor abdominal, náuseas, vómitos, pérdida de apetito, pérdida de peso y fatiga. En algunos casos, los parásitos pueden invadir tejidos extraintestinales y causar complicaciones más graves.

La transmisión de estos parásitos puede ocurrir a través del consumo de agua o alimentos contaminados, contacto directo con personas infectadas o mediante vectores (como moscas, cucarachas y lombrices de tierra). El diagnóstico se realiza mediante el examen de heces para detectar huevos, quistes u otros rastros de parásitos. El tratamiento suele implicar la administración de medicamentos antiparasitarios específicos para eliminar los parásitos del cuerpo.

Las infecciones por protozoos son infecciones causadas por un tipo de organismos microscópicos llamados protozoos, que pertenecen al grupo de los protistas. Los protozoos pueden ser unicelulares o coloniales y poseen movilidad gracias a flagelos, cilios o pseudópodos. Pueden sobrevivir en diferentes entornos, incluyendo agua dulce, salada y suelo húmedo, así como dentro de otros organismos vivos donde causan infecciones.

Las infecciones por protozoos pueden afectar a humanos y animales, y algunos tipos específicos de protozoos se transmiten entre humanos o entre animales y humanos. La transmisión puede ocurrir a través del consumo de agua o alimentos contaminados, contacto directo con un huésped infectado o mediante la picadura de insectos vectores como mosquitos o garrapatas.

Algunos ejemplos comunes de infecciones por protozoos en humanos incluyen:

1. Malaria: Una enfermedad causada por el parásito Plasmodium, que se transmite a los humanos a través de la picadura de mosquitos infectados.
2. Giardiasis: Una infección intestinal causada por el protozoo Giardia lamblia, que se transmite al consumir agua o alimentos contaminados con heces humanas.
3. Amebiasis: Una enfermedad intestinal causada por el protozoo Entamoeba histolytica, que se transmite al consumir agua o alimentos contaminados con heces humanas.
4. Cryptosporidiosis: Una infección intestinal causada por el protozoo Cryptosporidium parvum, que se transmite al consumir agua o alimentos contaminados con heces de animales o humanos.
5. Toxoplasmosis: Una enfermedad causada por el protozoo Toxoplasma gondii, que se transmite al ingerir carne cruda o poco cocida de animales infectados o al entrar en contacto con heces de gatos infectados.

El tratamiento de las infecciones por protozoos depende del tipo de parásito y de la gravedad de la enfermedad. Puede incluir medicamentos antiparasitarios, reposición de líquidos y electrolitos perdidos, y medidas de apoyo para aliviar los síntomas.

No existe una definición específica de "proteínas protozoarias" en la literatura médica o científica. El término "protozoario" se refiere a un grupo de organismos unicelulares heterogéneos que presentan formas de vida complejas, muchos de los cuales son parásitos humanos y causan diversas enfermedades. Cada especie de protozoo tiene un conjunto único de proteínas que desempeñan diferentes funciones en su supervivencia, reproducción y patogenicidad.

Algunas de estas proteínas pueden tener propiedades antigénicas y ser objeto de estudio en el desarrollo de vacunas o diagnósticos de enfermedades protozoarias como la malaria, la giardiasis, la toxoplasmosis o la amebiasis. Sin embargo, no hay una clasificación o categorización especial de proteínas que sean específicas de los protozoos y, por lo tanto, no existe una definición médica establecida para "proteínas protozoarias".

No existe una definición médica específica de "ADN protozoario" porque los protozoarios no son un grupo monofilético, lo que significa que no comparten necesariamente una única secuencia o tipo particular de ADN. Los protozoarios son organismos unicelulares eucariotas que incluyen varios grupos taxonómicos diferentes, como los flagelados, esporozoos, ciliados y rhizopods.

Cada grupo de protozoarios tiene su propio conjunto característico de genes y ADN, aunque comparten algunas similitudes básicas en términos de la estructura y función de sus genomas. Por ejemplo, muchos protozoarios contienen mitocondrias y otros orgánulos similares a las plantas y animales, lo que sugiere una relación evolutiva distante con esos grupos.

Si está buscando información sobre el ADN de un protozoo específico o de un grupo particular de protozoarios, sería mejor formular su pregunta de manera más específica para obtener una respuesta más precisa y útil.

Las heces, también conocidas como deposiciones o excrementos, se refieren a las materias fecales que se eliminan del cuerpo durante el proceso de defecación. Constituyen el residuo sólido final de la digestión y consisten en una mezcla compleja de agua, desechos metabólicos, bacterias intestinales no digeridas, mucus y células muertas del revestimiento del intestino grueso.

El aspecto, el color, el olor y la consistencia de las heces pueden variar considerablemente entre las personas y en un mismo individuo, dependiendo de varios factores como la dieta, el estado de hidratación, el nivel de actividad física y la salud general. Sin embargo, cuando se presentan cambios importantes o persistentes en estas características, especialmente si van acompañados de otros síntomas como dolor abdominal, náuseas, vómitos o sangrado rectal, pueden ser indicativos de alguna afección médica subyacente y requerir una evaluación clínica apropiada.

"Giardia lamblia", ahora más comúnmente conocida como "Giardia duodenalis" o simplemente "Giardia", es un protozoo flagelado que se encuentra en el medio ambiente y puede causar infecciones intestinales en humanos y animales. Se trata de un importante patógeno entérico que causa giardiasis, una enfermedad intestinal generalmente benigna pero altamente infecciosa.

El ciclo de vida de Giardia incluye dos formas: la trofozoita y la quiste. La trofozoita es la forma activa y replicativa que se adhiere a la superficie del epitelio intestinal, mientras que el quiste es la forma resistente al medio ambiente que se transmite de un huésped a otro, generalmente a través de la vía fecal-oral.

La infección por Giardia ocurre cuando una persona ingiere agua o alimentos contaminados con quistes de Giardia. Después del consumo, los quistes se liberan en el intestino delgado y se convierten en trofozoítos, que se multiplican y causan inflamación y daño a la mucosa intestinal. Esto puede conducir a una variedad de síntomas, como diarrea acuosa, dolor abdominal, náuseas, vómitos, flatulencia y pérdida de apetito. En algunos casos, la infección puede ser asintomática.

El diagnóstico de giardiasis generalmente se realiza mediante el examen microscópico de heces para detectar quistes o trofozoítos de Giardia. También existen pruebas de detección de antígenos y pruebas moleculares más sensibles y específicas, como la reacción en cadena de la polimerasa (PCR). El tratamiento generalmente implica el uso de medicamentos antiparasitarios, como metronidazol o tinidazol.

La parasitología es una rama de la microbiología y la medicina que se ocupa del estudio de los parásitos, organismos que viven sobre o dentro de otro organismo, llamado huésped, obteniendo su alimento a expensas del mismo. Esto puede causar diversos grados de daño o enfermedad en el huésped. La parasitología incluye la identificación, el ciclo vital, la patogénesis, la epidemiología, el diagnóstico y el tratamiento de los parásitos que infectan a los humanos, animales y plantas. Los parásitos pueden ser protozoarios (unicelulares), helmintos (gusanos) o artrópodos (insectos y ácaros). La parasitología también se estudia en el contexto de la salud pública, la zoonosis y la ecología.

Los antígenos son sustancias extrañas que pueden ser percibidas por el sistema inmune y desencadenar una respuesta inmunitaria. Cuando se trata de protozoos, organismos unicelulares que causan enfermedades infecciosas en humanos y animales, los antígenos son componentes específicos de la superficie o del interior de estos microorganismos que pueden ser reconocidos por el sistema inmune como extraños.

La detección de antígenos de protozoos puede ser útil en el diagnóstico y seguimiento de diversas enfermedades parasitarias, ya que la presencia de estos antígenos indica la existencia activa del parásito en el cuerpo. Algunos ejemplos de antígenos de protozoos incluyen:

* Antígenos de Giardia lamblia: Este protozoo causa giardiasis, una infección intestinal que puede causar diarrea, dolor abdominal y malabsorción. Los antígenos de Giardia se pueden detectar en las heces del paciente mediante pruebas de inmunoensayo o PCR.
* Antígenos de Plasmodium spp.: Estos protozoos causan la malaria, una enfermedad grave y a menudo mortal transmitida por mosquitos. Los antígenos de Plasmodium se pueden detectar en la sangre del paciente mediante pruebas rápidas de diagnóstico o microscopía.
* Antígenos de Toxoplasma gondii: Este protozoo causa toxoplasmosis, una infección que afecta principalmente al sistema nervioso y puede causar síntomas graves en personas con sistemas inmunes debilitados. Los antígenos de Toxoplasma se pueden detectar en la sangre del paciente mediante pruebas serológicas o PCR.
* Antígenos de Cryptosporidium spp.: Estos protozoos causan cryptosporidiosis, una infección intestinal que puede causar diarrea grave y deshidratación. Los antígenos de Cryptosporidium se pueden detectar en las heces del paciente mediante pruebas de inmunoensayo o PCR.

La detección de antígenos puede ser una herramienta útil para el diagnóstico y el seguimiento del tratamiento de estas infecciones, especialmente en áreas donde los recursos son limitados o cuando se necesita una respuesta rápida. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la sensibilidad y especificidad de las pruebas de detección de antígenos pueden variar dependiendo del tipo de prueba utilizada y del momento en que se realiza la prueba. Por lo tanto, es importante seguir las recomendaciones del fabricante y consultar a un profesional médico para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.

Según los criterios de clasificación establecidos por el Sistema de Clasificación Internacional de Enfermedades (ICD-10) de la Organización Mundial de la Salud (OMS), no existe una definición médica específica para 'Endolimax' como entidad clínica o condición de enfermedad. Sin embargo, 'Endolimax' se refiere a un género de protozoos flagelados que pertenecen al filo Metamonada y a la clase Retortamonadida.

Los representantes más conocidos del género Endolimax son E. nana e Ichelminthes sp., que se encuentran principalmente en el tracto gastrointestinal de los mamíferos, incluidos los seres humanos, y raramente causan infecciones clínicamente significativas o enfermedades graves. La presencia de estos protozoos en las heces puede indicar una posible infección intestinal, pero generalmente no se considera patológica a menos que se detecten en grandes cantidades o junto con otros signos y síntomas de enfermedad.

Debido a la falta de definición médica específica para 'Endolimax' como entidad clínica, es importante buscar orientación adicional y asesoramiento experto al interpretar los resultados de las pruebas diagnósticas o evaluar los posibles efectos en la salud.

Trichomonas es un género de protozoos flagelados que causa tricomoniasis, una infección parasitaria común en humanos. El organismo más específico involucrado en esta infección es Trichomonas vaginalis, que a menudo se encuentra en el tracto urogenital de las mujeres y, con menos frecuencia, en los hombres.

Este protozoo microscópico tiene forma ovalada y mide aproximadamente 10-20 micrómetros de longitud. Posee cuatro flagelos que sobresalen por delante y ayudan al parásito a desplazarse. Otra característica distintiva es un undulipodio, una estructura ondulante presente en la parte posterior del organismo.

La tricomoniasis se transmite principalmente a través de relaciones sexuales vaginales sin protección con una persona infectada. Los síntomas pueden variar desde leves o inexistentes hasta graves, especialmente en mujeres, e incluyen flujo vaginal anormal, picazón, ardor y dolor durante las relaciones sexuales o la micción. En hombres, los síntomas suelen ser más leves o incluso ausentes, aunque pueden experimentar irritación del tracto urinario o eyaculación anormal.

Es importante destacar que el tratamiento de la tricomoniasis generalmente implica la administración de antibióticos, como metronidazol o tinidazol, tanto para el paciente afectado como para sus parejas sexuales actuales y recientes, con el fin de prevenir la reinfección y la propagación de la enfermedad.

Las proteasas de cisteína son un tipo específico de enzimas proteolíticas que utilizan un residuo de cisteína en su sitio activo para catalizar la ruptura de enlaces peptídicos en las cadenas polipeptídicas. Estas enzimas desempeñan funciones cruciales en una variedad de procesos celulares, como la señalización intracelular, el metabolismo de proteínas y la respuesta al estrés.

Las proteasas de cisteína se clasifican dentro de la clase EC 3.4.22 en la nomenclatura sistemática de las enzimas. Algunos ejemplos bien conocidos de proteasas de cisteína incluyen la tripsina, la quimotripsina y la elastasa, que son importantes para la digestión de proteínas en el tracto gastrointestinal. Además, las proteasas de cisteína también están involucradas en la respuesta inmunológica, donde desempeñan un papel crucial en la degradación de proteínas extrañas y la presentación de antígenos a los linfocitos T.

Debido a su importancia en una variedad de procesos celulares, las proteasas de cisteína han sido objeto de un intenso estudio como dianas terapéuticas potenciales para el tratamiento de diversas enfermedades, incluyendo el cáncer y las enfermedades inflamatorias. Sin embargo, también se ha demostrado que las proteasas de cisteína desempeñan un papel importante en la patogénesis de algunas enfermedades, como la fibrosis quística y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Por lo tanto, comprender el papel y la regulación de las proteasas de cisteína es fundamental para desarrollar estrategias terapéuticas efectivas.

El genoma de protozoos se refiere al conjunto completo de genes o la secuencia de ADN presente en los organismos pertenecientes al reino Protozoa. Los protozoos son un grupo diversificado de microorganismos unicelulares que incluyen varias especies parásitas y no parásitas. El tamaño y la complejidad del genoma de protozoos pueden variar considerablemente entre diferentes especies, desde unos pocos megabases en organismos simplistas hasta varios gigabases en formas más complejas.

El análisis del genoma de protozoos puede proporcionar información valiosa sobre los genes y los mecanismos genéticos que subyacen a sus procesos biológicos, como la nutrición, la reproducción y la patogénesis. También puede ayudar a identificar posibles dianas terapéuticas para el desarrollo de nuevos fármacos y estrategias de control de enfermedades causadas por protozoos parásitos.

Sin embargo, el estudio del genoma de protozoos también puede ser desafiante, dada la gran diversidad genética y biológica dentro del grupo. Además, muchas especies de protozoos aún no han sido cultivadas en el laboratorio o su genoma aún no ha sido secuenciado, lo que limita nuestra comprensión de su biología y patogénesis.

Los anticuerpos antiprotozoarios son inmunoglobulinas producidas por el sistema inmune en respuesta a una infección por protozoos, organismos unicelulares que pueden causar diversas enfermedades en humanos y animales. Estos anticuerpos se unen específicamente a los antígenos presentes en la superficie o dentro de los protozoos, marcándolos para ser destruidos por otras células inmunes como los neutrófilos y los macrófagos.

La detección de anticuerpos antiprotozoarios en la sangre puede utilizarse como un indicador de una infección previa o actual por protozoos. Sin embargo, la interpretación de los resultados puede ser compleja, ya que la presencia de anticuerpos no siempre indica una enfermedad activa y, además, algunas personas pueden tener niveles bajos de anticuerpos sin haber tenido una infección previa.

Algunos ejemplos de protozoos que pueden desencadenar la producción de anticuerpos antiprotozoarios incluyen Plasmodium spp., los agentes causantes de la malaria, y Toxoplasma gondii, el agente etiológico de la toxoplasmosis. Otras enfermedades protozoarias importantes que pueden desencadenar una respuesta de anticuerpos incluyen la giardiasis, causada por Giardia lamblia, y la amebiasis, causada por Entamoeba histolytica.

*Nota: La siguiente respuesta se basa en la información médica y científica disponible hasta el momento. La comprensión y clasificación de Blastocystis hominis puede seguir siendo un tema de investigación y discusión en la comunidad científica.*

Blastocystis hominis es un organismo unicelular que se encuentra en el intestino humano y se ha categorizado generalmente como un protista intestinal. Históricamente, su estatus como patógeno o comensal (un organismo que vive en un huésped sin causar daño) ha sido objeto de debate. Algunos estudios han asociado la presencia de B. hominis con diversos síntomas gastrointestinales, como diarrea, dolor abdominal y flatulencia, mientras que otros estudios no encontraron una relación clara entre el organismo y los síntomas.

La definición médica de Blastocystis hominis es: un protista intestinal comúnmente encontrado en el ser humano, cuya patogenicidad y rol en la fisiopatología de los trastornos gastrointestinales aún se discuten y requieren más investigación. El diagnóstico y tratamiento de B. hominis dependen de los síntomas individuales y de la evaluación clínica del paciente por parte de un profesional médico.

Los protozoarios son organismos unicelulares, generalmente móviles, que se encuentran en ambientes acuáticos y húmedos. Aunque no existe una definición médica específica de "genes protozoarios", los genes se refieren a las unidades hereditarias de la vida que contienen información genética y se encuentran dentro del núcleo de las células.

En el contexto de la biología molecular y genética, los científicos pueden estudiar los genes específicos que se encuentran en protozoarios particulares para comprender mejor su biología y comportamiento. Por ejemplo, los investigadores pueden examinar los genes involucrados en la patogénesis de protozoarios parasitarios como Plasmodium (que causa la malaria) o Toxoplasma (que causa toxoplasmosis) para desarrollar nuevas estrategias de tratamiento y prevención.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que los protozoarios son un grupo diverso y heterogéneo de organismos, y cada especie tiene su propio conjunto único de genes que determinan sus características y comportamientos distintivos. Por lo tanto, no hay una definición médica única o universal de "genes protozoarios" que se aplique a todos los miembros del grupo.

Lectinas, en términos médicos y bioquímicos, se definen como un grupo de proteínas o glucoproteínas que poseen la capacidad de reversiblemente y específicamente unirse a carbohidratos o glúcidos. Estas moléculas están ampliamente distribuidas en la naturaleza y se encuentran en una variedad de fuentes, incluyendo plantas, animales e incluso microorganismos.

Las lectinas tienen la habilidad de aglutinar células, como los eritrocitos, y precipitar polisacáridos, glicoproteínas o glucolípidos gracias a su unión con los carbohidratos. Su nombre proviene del latín "legere", que significa seleccionar, dado que literalmente "seleccionan" los carbohidratos con los que interactuar.

Existen diferentes tipos de lectinas clasificadas según su especificidad de unión a determinados azúcares y la estructura tridimensional de su sitio activo, como las manosa-específicas, galactosa-específicas, N-acetilglucosamina-específicas y fucosa-específicas.

En el campo médico, las lectinas han despertado interés por su potencial aplicación en diversas áreas, como la diagnosis de enfermedades, la terapia dirigida y el desarrollo de vacunas. No obstante, también se les ha relacionado con posibles efectos tóxicos e inmunogénicos, por lo que su uso requiere un cuidadoso estudio y análisis.

La acetilgalactosamina es un monosacárido derivado de la galactosa, que se forma cuando un grupo acetilo se agrega a la molécula de galactosa. También se conoce como N-acetil-D-galactosamina o GalNAc.

En el cuerpo humano, la acetilgalactosamina desempeña un papel importante en la síntesis y modificación de los glicanos, que son cadenas complejas de azúcares unidos a las proteínas y lípidos. La acetilgalactosamina se utiliza como residuo inicial en la formación de muchos tipos de estructuras de glicanos, incluyendo los oligosacáridos de mucinas y los grupos O-linked de glucoproteínas.

La acetilgalactosamina también es un componente importante en la matriz extracelular, donde desempeña un papel en la adhesión celular y la comunicación intercelular. Además, se ha demostrado que la acetilgalactosamina tiene propiedades antiinflamatorias y puede desempeñar un papel en la modulación de la respuesta inmunitaria.

En medicina, la acetilgalactosamina se utiliza como marcador en pruebas diagnósticas para detectar ciertas afecciones médicas, como enfermedades hepáticas y neurológicas. También se está investigando su uso como posible tratamiento para enfermedades como la fibrosis quística y la enfermedad de Pompe.

La Giardia es un tipo de protozoario flagelado, un organismo microscópico unicelular que se encuentra en el medio ambiente y puede causar infecciones intestinales en humanos y animales. La especie más comúnmente asociada con enfermedades en humanos es Giardia lamblia (también conocida como Giardia duodenalis o Giardia intestinalis).

La infección por Giardia, llamada giardiasis, se adquiere más comúnmente al ingerir agua u alimentos contaminados con heces que contienen el parásito. Esto puede ocurrir en áreas donde las prácticas de saneamiento y higiene son deficientes. También es posible contraer giardiasis a través del contacto directo con personas o animales infectados, especialmente en guarderías, hospitales, piscinas y lugares con malas condiciones sanitarias.

Los síntomas de la giardiasis pueden variar desde asintomáticos hasta diarrea acuosa, dolor abdominal, hinchazón, náuseas, vómitos, pérdida de apetito y deshidratación. En algunos casos, los síntomas pueden ser leves y durar solo una o dos semanas; sin embargo, en otros, la infección puede persistir durante meses y causar complicaciones como desnutrición y pérdida de peso.

El diagnóstico de giardiasis generalmente se realiza mediante el examen de muestras de heces para detectar cisticeros de Giardia u otros métodos de detección, como pruebas de antígenos o PCR. El tratamiento suele implicar la administración de medicamentos antiparasitarios, como metronidazol o tinidazol, para eliminar el parásito del cuerpo. Las medidas preventivas incluyen el lavado adecuado de las manos después del uso de los servicios sanitarios y antes de comer, evitar beber agua no tratada y tomar precauciones al viajar a áreas donde la enfermedad es común.

Dientamoeba es un género de protozoos que pertenecen al phylum Sarcomastigophora y la clase Mastigophora. Es un parásito intestinal primariamente conocido por infectar humanos, aunque también se ha encontrado en algunos animales como simios no humanos.

La especie más común que afecta a los humanos es Dientamoeba fragilis. A diferencia de muchos otros protozoos intestinales, Dientamoeba fragilis carece de cyste (formas de resistencia) en su ciclo vital, lo que hace que su transmisión sea probablemente por vía fecal-oral, a través de las manos o alimentos contaminados.

Los síntomas de la infección por Dientamoeba pueden incluir diarrea crónica, dolor abdominal, náuseas, flatulencia y pérdida de apetito. Sin embargo, algunas personas infectadas pueden no presentar ningún síntoma. El diagnóstico se realiza mediante el examen de heces para detectar la presencia del parásito. El tratamiento generalmente implica el uso de antibióticos como tinidazol o metronidazol.

Los parásitos, en términos médicos, se definen como organismos que viven en un huésped y se alimentan de sus tejidos o fluidos corporales, a menudo al dañar directa o indirectamente al huésped. Los parásitos pueden ser protozoarios (un solo célula, como Plasmodium, que causa la malaria), helmintos (gusanos, como Ascaris, que causa ascariasis) o artrópodos (insectos y ácaros, como los piojos y las sarna). La infección por parásitos se conoce como parasitosis. Los parásitos pueden transmitirse de diversas maneras, incluyendo el agua y los alimentos contaminados, el contacto directo con un huésped infectado o vectores (como mosquitos o garrapatas). Los síntomas de las infecciones parasitarias varían ampliamente dependiendo del tipo de parásito, pero pueden incluir dolor abdominal, diarrea, fiebre, erupciones cutáneas y debilidad. El tratamiento generalmente implica la administración de medicamentos antiparasitarios específicos para eliminar el parásito del cuerpo.

Los antiprotozoarios son un tipo de fármacos que se utilizan para tratar infecciones causadas por protozoos, que son organismos microscópicos unicelulares que pueden parasitar y multiplicarse dentro del cuerpo humano. Estos medicamentos funcionan interfiriendo con el crecimiento, reproducción o supervivencia de los protozoos, lo que ayuda a eliminar la infección y aliviar los síntomas asociados.

Existen diferentes tipos de antiprotozoarios, cada uno diseñado para tratar diferentes especies de protozoos. Algunos ejemplos comunes incluyen:

* Metronidazol: se utiliza para tratar infecciones causadas por protozoos como Giardia lamblia y Entamoeba histolytica.
* Clotrimazol: se usa para tratar infecciones vaginales causadas por el protozoo Candida albicans.
* Pentamidina: se utiliza para tratar la enfermedad del sueño, una infección grave causada por el protozoo Trypanosoma brucei.
* Quinina: se usa para tratar la malaria, una enfermedad parasitaria grave causada por el protozoo Plasmodium falciparum.

Es importante seguir las instrucciones de dosificación y administración del médico al tomar antiprotozoarios, ya que cada medicamento tiene diferentes propiedades farmacológicas y efectos secundarios potenciales. Además, es fundamental completar el curso completo de tratamiento para asegurarse de eliminar por completo la infección y prevenir una recaída.

La giardiasis es una infección intestinal causada por el protozoo parásito Giardia lamblia, también conocido como Giardia intestinalis o Giardia duodenalis. Este parásito se encuentra en todo el mundo y se transmite a través de la ingesta de agua o alimentos contaminados con heces que contienen cistes de Giardia.

La infección puede ocurrir al beber agua contaminada con cistas de Giardia, comer alimentos mal lavados que han estado en contacto con materia fecal contaminada, o después de tener contacto directo con una persona infectada, especialmente entre niños en guarderías y personal de cuidado infantil.

Después de la ingestión, las cistas se abren en el intestino delgado, liberando trofozoitos, formas activas y móviles del parásito, que se adhieren a la superficie del revestimiento intestinal. Allí, se reproducen por división binaria y eventualmente se convierten en cistas, las cuales son eliminadas en las heces.

Los síntomas de la giardiasis pueden variar desde asintomáticos hasta graves, dependiendo de la persona infectada y la cantidad de parásitos ingeridos. Los síntomas más comunes incluyen diarrea acuosa, flatulencia, calambres abdominales, náuseas, pérdida de apetito y peso, y malabsorción de nutrientes. En algunos casos, la infección puede causar deshidratación severa, especialmente en niños y personas mayores.

El diagnóstico de giardiasis generalmente se realiza mediante el examen de muestras de heces para detectar cistas o trofozoitos de Giardia. También existen pruebas de detección de antígenos en heces y pruebas moleculares que pueden ayudar a confirmar el diagnóstico.

El tratamiento de giardiasis suele implicar la administración de medicamentos antiparasitarios, como metronidazol o tinidazol, durante 5 a 10 días. En casos graves o en personas con sistemas inmunológicos debilitados, pueden ser necesarias dosis más altas o tratamientos más prolongados.

La prevención de la giardiasis se puede lograr mediante prácticas adecuadas de higiene, como lavarse las manos con agua y jabón después de usar el baño y antes de comer, evitar beber agua no tratada o contaminada, especialmente durante viajes internacionales, y mantener una buena higiene alimentaria.

El Metronidazol es un fármaco antibacteriano y antiprotozoario ampliamente utilizado en el campo de la medicina. Actúa mediante la interrupción de la capacidad de las bacterias y protozoos para reproducirse y sobrevivir. Es particularmente eficaz contra anaerobios, protozoos y algunas bacterias aeróbicas susceptibles.

Se utiliza para tratar una variedad de infecciones, incluyendo aquellas causadas por bacterias anaerobias (que no requieren oxígeno para sobrevivir), como las infecciones abdominales y ginecológicas, así como infecciones causadas por protozoos, como la giardiasis y la amebiasis.

El metronidazol se administra generalmente por vía oral, aunque también está disponible en forma de crema para aplicaciones tópicas. Al igual que con cualquier medicamento, el metronidazol puede producir efectos secundarios, como náuseas, vómitos, diarrea, sabor metálico en la boca y dolores de cabeza. En raras ocasiones, puede causar reacciones alérgicas graves.

Es importante seguir las instrucciones de dosificación cuidadosamente cuando se toma metronidazol, ya que un uso inadecuado puede reducir su eficacia o aumentar el riesgo de efectos secundarios. Además, como con todos los antibióticos, es crucial terminar todo el curso del tratamiento, incluso si los síntomas desaparecen antes. De lo contrario, existe el riesgo de que las bacterias sobrevivientes se vuelvan resistentes al medicamento.

Los Datos de Secuencia Molecular se refieren a la información detallada y ordenada sobre las unidades básicas que componen las moléculas biológicas, como ácidos nucleicos (ADN y ARN) y proteínas. Esta información está codificada en la secuencia de nucleótidos en el ADN o ARN, o en la secuencia de aminoácidos en las proteínas.

En el caso del ADN y ARN, los datos de secuencia molecular revelan el orden preciso de las cuatro bases nitrogenadas: adenina (A), timina/uracilo (T/U), guanina (G) y citosina (C). La secuencia completa de estas bases proporciona información genética crucial que determina la función y la estructura de genes y proteínas.

En el caso de las proteínas, los datos de secuencia molecular indican el orden lineal de los veinte aminoácidos diferentes que forman la cadena polipeptídica. La secuencia de aminoácidos influye en la estructura tridimensional y la función de las proteínas, por lo que es fundamental para comprender su papel en los procesos biológicos.

La obtención de datos de secuencia molecular se realiza mediante técnicas experimentales especializadas, como la reacción en cadena de la polimerasa (PCR), la secuenciación de ADN y las técnicas de espectrometría de masas. Estos datos son esenciales para la investigación biomédica y biológica, ya que permiten el análisis de genes, genomas, proteínas y vías metabólicas en diversos organismos y sistemas.

Gerbillinae es un término taxonomico en la clasificación de los mamíferos roedores. Se refiere a una subfamilia dentro de la familia Muridae, que incluye a varios géneros y especies de pequeños roedores conocidos comúnmente como gerbillos o ratones saltarines. Estos animales son originarios de África y Asia, y se caracterizan por tener cuerpos compactos, colas largas y patas traseras grandes adaptadas para saltar. Algunas especies de Gerbillinae son populares como mascotas domésticas.

En la medicina, el término 'esporas protozoarias' no se considera preciso o ampliamente aceptado. Los protozoos son organismos unicelulares que pueden tener etapas de reproducción o resistencia especializadas, pero no producen esporas en el sentido similar a los hongos o bacterias. Algunos protozoos pueden formar quistes, estructuras resistentes similares a las esporas, que ayudan a la supervivencia en condiciones adversas. Sin embargo, se recomienda evitar el uso de la frase 'esporas protozoarias' y en su lugar, referirse a los quistes protozoarios u otras etapas de vida específicas según el contexto.

La helmintiasis es una infección parasitaria causada por la presencia y crecimiento de gusanos parásitos conocidos como helmintos en el cuerpo humano. Estos gusanos pueden ser lombrices redondas (nematodos), como Ascaris, Trichuris y Enterobius, o gusanos planos (platelmintos), como tenias, solitarias y esquistosomas.

La infección puede ocurrir al entrar en contacto con suelos, aguas o alimentos contaminados con huevos o larvas de estos parásitos. Los síntomas varían dependiendo del tipo de gusano y la localización de la infección, pero pueden incluir dolor abdominal, diarrea, náuseas, pérdida de peso y anemia. En casos graves, la helmintiasis puede causar complicaciones como obstrucción intestinal o daño a órganos vitales. El tratamiento generalmente implica el uso de fármacos antiparasitarios específicos para eliminar los gusanos del cuerpo. La prevención se centra en la mejora de las condiciones sanitarias y la educación sobre prácticas adecuadas de higiene personal y alimentaria.

El "Verde de Metilo" es un tinte o colorante químico que se utiliza en histología, un campo de la patología anatomía patológica que estudia los tejidos corporales a nivel microscópico. Se emplea como un agente de contraste para colorear selectivamente diversas estructuras tisulares y celulares, lo que facilita su observación, identificación y análisis en el microscopio.

La fórmula química del Verde de Metilo es C16H18N3SCl, y pertenece a la clase de los triarciletiazinas. Su uso principal se centra en la tinción diferencial de proteínas y ácidos nucleicos, como el ADN y el ARN, dentro de las células.

Es importante mencionar que el Verde de Metilo no solo se limita a su uso en histología, sino que también tiene aplicaciones en otras áreas científicas, como la biología molecular y la bioquímica. No obstante, es crucial seguir las precauciones y normas de seguridad al manipular este químico, ya que puede representar un riesgo para la salud si no se maneja adecuadamente.

No existe una definición médica específica de "ARN protozoario" porque los protozoos no producen un tipo particular o único de ARN que los distinga. Los protozoos son organismos unicelulares, generalmente móviles, que pertenecen al superreino Protozoa. Pueden tener diferentes tipos de ARN (ácido ribonucleico) en sus células, como ARN mensajero (mRNA), ARN de transferencia (tRNA) y ARN ribosómico (rRNA), que desempeñan diversas funciones en la síntesis de proteínas y otros procesos celulares.

Cada tipo de protozoo tendrá sus propios genes y, por lo tanto, su propio conjunto específico de ARN que se transcribe a partir de esos genes. Por lo tanto, no hay una definición médica única o específica de "ARN protozoario". En cambio, cada tipo de protozoo tendrá sus propios tipos y cantidades de ARN presentes en su célula.

Los eucariotas son organismos que tienen células con un núcleo verdadero, delimitado por una membrana nuclear. Esta característica los distingue de los procariontes, como las bacterias y archaea, que no poseen un núcleo definido. El término "eucariota" proviene del griego "eu" que significa "bueno" o "verdadero", y "karyon" que significa "núcleo".

Las células eucariotas también contienen otros orgánulos membranosos complejos, como mitocondrias, cloroplastos (en plantas), retículo endoplásmico, aparato de Golgi y lisosomas. Estos orgánulos permiten a las células eucariotas realizar funciones más complejas que las células procariontes, como la producción de energía a través de la respiración celular y la fotosíntesis en el caso de las plantas.

Los eucariotas incluyen una gran variedad de organismos, desde protozoos unicelulares hasta plantas, hongos y animales multicelulares. La teoría endosimbiótica sugiere que los orgánulos como las mitocondrias y cloroplastos alguna vez fueron bacterias que fueron internalizadas por células eucariotas ancestrales, y con el tiempo evolucionaron en una relación simbiótica.

Los helmintos son organismos parásitos que pertenecen al grupo de los gusanos. Se caracterizan por tener un cuerpo blando, sin aparato circulatorio y con una cavidad digestiva interna completa. Pueden ser planos (platelmintos) o cilíndricos (nemátodos, cestodos y acantocéfalos).

Los helmintos parasitan diferentes tejidos y órganos del cuerpo humano, produciendo una serie de enfermedades conocidas como helmintiasis. Algunas de estas enfermedades son ascaridiasis, anquilostomiasis, teniasis, hidatidosis, entre otras.

La infección por helmintos se produce generalmente al ingerir los huevos o larvas del parásito a través de alimentos o agua contaminados, o directamente por contacto con la piel en el caso de algunos nemátodos.

El tratamiento de las helmintiasis requiere generalmente de la administración de fármacos antiparasitarios específicos y en ocasiones puede ser necesario realizar procedimientos quirúrgicos para eliminar los parásitos más grandes.

La definición médica de "Antitricomonas" se refiere a un medicamento o fármaco que es utilizado específicamente para tratar infecciones causadas por el parásito Tricomonas vaginalis, que es la causa más común de tricomoniasis, una enfermedad de transmisión sexual. Este tipo de fármacos se conocen como antibióticos y suelen ser nitroimidazoles, como metronidazol o tinidazol, que funcionan mediante la interrupción de los procesos metabólicos esenciales del parásito. Es importante recalcar que el uso de estos medicamentos debe estar indicado y supervisado por un profesional médico capacitado, ya que su mal uso o automedicación puede acarrear consecuencias negativas para la salud.

La galactosa es un monosacárido, específicamente una hexosa, que se encuentra en la naturaleza. Es un azúcar simple que los mamíferos utilizan para construir la lactosa, el azúcar presente en la leche. La galactosa se forma cuando el cuerpo divide la lactosa, un proceso que ocurre durante la digestión.

En términos médicos, a veces se hace referencia a la galactosemia, una condición genética en la que el cuerpo es incapaz de metabolizar adecuadamente la galactosa porque le falta la enzima necesaria, la galactosa-1-fosfato uridiltransferasa. Esta afección puede causar problemas graves de salud, especialmente si no se diagnostica y trata temprano. Los síntomas pueden incluir letargo, vómitos, ictericia, heces con olor a heno y problemas de crecimiento. Si no se trata, la galactosemia puede causar daño cerebral y otros problemas de salud graves. El tratamiento generalmente implica una dieta libre de lactosa y galactosa.

La Reacción en Cadena de la Polimerasa, generalmente conocida como PCR (Polymerase Chain Reaction), es un método de bioquímica molecular que permite amplificar fragmentos específicos de DNA (ácido desoxirribonucleico). La técnica consiste en una serie de ciclos de temperatura controlada, donde se produce la separación de las hebras de DNA, seguida de la síntesis de nuevas hebras complementarias usando una polimerasa (enzima que sintetiza DNA) y pequeñas moléculas de DNA llamadas primers, específicas para la región a amplificar.

Este proceso permite obtener millones de copias de un fragmento de DNA en pocas horas, lo que resulta útil en diversos campos como la diagnóstica molecular, criminalística, genética forense, investigación genética y biotecnología. En el campo médico, se utiliza ampliamente en el diagnóstico de infecciones virales y bacterianas, detección de mutaciones asociadas a enfermedades genéticas, y en la monitorización de la respuesta terapéutica en diversos tratamientos.

La secuencia de aminoácidos se refiere al orden específico en que los aminoácidos están unidos mediante enlaces peptídicos para formar una proteína. Cada proteína tiene su propia secuencia única, la cual es determinada por el orden de los codones (secuencias de tres nucleótidos) en el ARN mensajero (ARNm) que se transcribe a partir del ADN.

Las cadenas de aminoácidos pueden variar en longitud desde unos pocos aminoácidos hasta varios miles. El plegamiento de esta larga cadena polipeptídica y la interacción de diferentes regiones de la misma dan lugar a la estructura tridimensional compleja de las proteínas, la cual desempeña un papel crucial en su función biológica.

La secuencia de aminoácidos también puede proporcionar información sobre la evolución y la relación filogenética entre diferentes especies, ya que las regiones conservadas o similares en las secuencias pueden indicar una ascendencia común o una función similar.

Las vacunas antiprotozoarias son vacunas específicamente diseñadas para prevenir enfermedades infecciosas causadas por protozoos, que son organismos unicelulares parasitarios. A diferencia de las bacterias y los virus, los protozoos son capaces de sobrevivir y multiplicarse dentro del cuerpo humano como parásitos. Algunos ejemplos de enfermedades protozoarias importantes incluyen la malaria, la giardiasis y la toxoplasmosis.

Las vacunas antiprotozoarias funcionan mediante la presentación del sistema inmunológico a los antígenos específicos de los protozoos, lo que desencadena una respuesta inmune adaptativa que ayuda a proteger al cuerpo contra futuras infecciones con ese mismo protozoo. Sin embargo, el desarrollo de vacunas antiprotozoarias ha resultado ser un desafío significativo debido a la complejidad de los protozoos y su capacidad para evadir las respuestas inmunes del huésped.

A pesar de estos desafíos, se han logrado algunos avances en el desarrollo de vacunas antiprotozoarias. Por ejemplo, la vacuna RTS,S/AS01 contra la malaria ha mostrado una eficacia moderada en ensayos clínicos y podría estar disponible en áreas endémicas en un futuro próximo. Otras vacunas antiprotozoarias en desarrollo incluyen las dirigidas contra la giardiasis, la leishmaniasis y la toxoplasmosis.

Un absceso hepático es una acumulación de pus en el hígado, generalmente como resultado de una infección. Puede ser causado por bacterias, parásitos o incluso por la propagación de una infección desde otra parte del cuerpo. Los síntomas pueden incluir dolor abdominal, fiebre, escalofríos, náuseas y vómitos. El diagnóstico generalmente se realiza mediante análisis de sangre, ecografías o tomografías computarizadas. El tratamiento suele implicar antibióticos para combatir la infección y posiblemente drenaje quirúrgico del absceso. Es importante buscar atención médica si se sospecha un absceso hepático, ya que puede causar complicaciones graves si no se trata adecuadamente.

Las galectinas son una familia de proteínas de unión a carbohidratos que se caracterizan por tener uno o más dominios de unión a beta-galactósidos conocidos como dominios galectina. Estas proteínas se unen específicamente a residuos de glicanos que contienen beta-galactósidos y desempeñan una variedad de funciones importantes en el cuerpo humano.

Las galectinas se expresan en una variedad de tejidos y células, incluyendo células inmunes, endoteliales, epiteliales y nerviosas. Se han identificado 15 miembros de la familia de galectinas en humanos, y cada uno tiene su propio patrón de expresión y función específicos.

Algunas de las funciones conocidas de las galectinas incluyen la regulación de la inflamación, la respuesta inmunitaria, la apoptosis (muerte celular programada), la adhesión celular, la migración y la proliferación celular. También se ha demostrado que desempeñan un papel importante en el desarrollo de varias enfermedades, como el cáncer, la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y las enfermedades neurodegenerativas.

En resumen, las galectinas son una familia de proteínas de unión a carbohidratos que desempeñan diversas funciones importantes en el cuerpo humano, incluyendo la regulación de la inflamación, la respuesta inmunitaria y la proliferación celular. También se han implicado en varias enfermedades, como el cáncer y la diabetes.

La adhesividad es un término médico que se refiere a la propiedad de dos tejidos o superficies biológicas para unirse o "pegarse" entre sí. Este fenómeno puede ocurrir de forma natural, como en el proceso de cicatrización de heridas, donde las células y los tejidos dañados se regeneran y se adhieren entre sí durante la curación.

Sin embargo, también puede haber situaciones en las que la adhesividad sea un problema clínico. Por ejemplo, después de una cirugía abdominal, las células y tejidos pueden crecer y formar bandas fibrosas anormales llamadas "adherencias" entre los órganos internos y la pared abdominal. Estas adherencias pueden causar dolor, limitación de la movilidad de los órganos y, en algunos casos, complicaciones como obstrucción intestinal o infertilidad femenina.

En resumen, la adhesividad es una propiedad importante en el proceso natural de curación y reparación del cuerpo, pero también puede ser un problema clínico cuando se produce de forma anormal o excesiva.

La quitina es un biopolímero que forma parte de la composición estructural de los exoesqueletos y las paredes celulares de varios organismos vivos, especialmente en hongos, crustáceos, insectos y otros artrópodos. Es un tipo de polisacárido formado por la unión de moléculas de N-acetilglucosamina, un derivado del azúcar glucosa.

En los seres humanos y otros mamíferos, no se sintetiza quitina de forma natural, pero puede encontrarse en pequeñas cantidades en alimentos como mariscos y setas. La quitina es resistente a la digestión humana, lo que significa que generalmente no se absorbe ni descompone durante el proceso digestivo.

En medicina, la quitina ha despertado interés debido a sus propiedades biológicas y potenciales usos terapéuticos. Algunos estudios han sugerido que puede tener efectos antiinflamatorios, antioxidantes y antimicrobianos, aunque se necesita realizar más investigación para confirmar estas propiedades y determinar su seguridad y eficacia en humanos.

La Serina O-Acetiltransferasa (SOAT, también conocida como SAT) es una enzima que desempeña un papel crucial en el metabolismo de los aminoácidos y la síntesis de determinados lípidos. Médicamente, su deficiencia puede estar asociada con ciertas afecciones genéticas raras.

La SOAT cataliza la transferencia del grupo acetilo desde el acetil-CoA al grupo hidroxilo de la L-serina, produciendo O-acetil-L-serina y CoA. Este proceso es un paso clave en la biosíntesis de etanolamina y colina, dos componentes importantes de las membranas celulares y del sistema nervioso central.

La alteración o deficiencia de esta enzima puede conducir a trastornos genéticos como la esquizofrenia, el autismo y otras enfermedades neurológicas y psiquiátricas. Sin embargo, se necesita más investigación para comprender plenamente su papel en estas condiciones y su potencial como diana terapéutica.

... gingivalis Entamoeba histolytica Entamoeba coli Cavalier-Smith T (agosto de 1998). «A revised six-kingdom system of ... doi:10.1016/0303-2647(91)90010-I. Datos: Q518891 Multimedia: Entamoeba / Q518891 Especies: Entamoeba (Parásitos, Archamoebae). ... Entamoeba es un género de amebas del filo Amoebozoa y clase Archamoebae incluido en su propia familia, Entamoebidae. Al igual ... Además, todas las especies de este género (a excepción de la Entamoeba gingivalis) presentan una fase quística, donde se ...
Datos: Q584299 Multimedia: Entamoeba coli / Q584299 Especies: Entamoeba coli (Protozoos, Archamoebae). ... Entamoeba coli es una ameba fácilmente encontrada en los intestinos de algunos animales, incluido el ser humano. Se presenta ... E. coli hay que distinguirla de otras amebas patógenas como Entamoeba histolytica y/o E. dispar. El diagnóstico se realiza ... Es una especie parásita mayormente no patógena del género Entamoeba que es de importancia clínica. Primero, porque a una ...
... es una ameba parásita anaerobia con forma ameboide, como su nombre lo indica, dentro del género Entamoeba ... Datos: Q131027 Multimedia: Entamoeba histolytica / Q131027 Especies: Entamoeba histolytica (Wikipedia:Páginas con referencias ... El hábitat de Entamoeba histolytica es la pared y la luz del colon, en especial el ciego, ascendente y el rectosigmoide, lugar ... Entamoeba histolytica afecta a los primates; los casos en perros y gatos son relativamente raros. Modo de transmisión: ruta ...
Entamoeba histolytica Entamoeba coli Jian, B.; Kolansky, A.; Baloach, Z.; Gupta, P. (2008). (en inglés) «Entamoeba gingivalis ... EAN: 978-84-939001-9-9 Datos: Q264363 Multimedia: Entamoeba gingivalis / Q264363 Especies: Entamoeba gingivalis (Archamoebae, ... Entamoeba gingivalis es una ameba de la cual solamente se conoce la etapa de trofozoito, se ignora si posee cualidades para ... Se encuentra en la boca en el interior de la bolsa gingival y en biopelículas cerca de la base de los dientes.[2]​ Entamoeba ...
de Bonilla, L. C., Guanipa, N., & García, R. A. (1976). Prevalencia de entamoeba histolytica, entamoeba hartmanni y otros ... Investigación Clínica, 17(1). Datos: Q5834161 Multimedia: Entamoeba hartmanni / Q5834161 Especies: Entamoeba hartmanni ( ... Entamoeba hartmanni es una ameba (filo Amoebozoa) con distribución mundial frecuentemente encontrada como comensal en los ...
Algunos protozoos: Entamoeba. Actinomyces. Rickettsia. Este espectro explica su utilización en las siguientes patologías, entre ...
El parásito unicelular Entamoeba histolytica. El hongo Schizosaccharomyces millet. También algunos orgánulos celulares se dice ...
De origen parasitario: Entamoeba histolytica y, en niños, Balantidium coli. Esta, en la época romana, se aliviaba con yema de ... Pinilla, Análida Elizabeth; López, Myriam Consuelo; Viasus, Diego Fernando (enero de 2008). «Historia del protozoo Entamoeba ... Entamoeba histolytica. Cuando es causada por Shigella se llama disentería bacilar (por su forma de bacilo), y cuando es causada ... se decidió nombrar a la ameba responsable de la disentería como Entamoeba hystolitica por su capacidad de destruir tejidos ( ...
Esta última especie ayudó a explicar por qué la mayoría de las personas que parecían estar infectadas con Entamoeba histolytica ... Clark, C. Graham (1 de julio de 1998). «Entamoeba dispar, an organism reborn». Transactions of the Royal Society of Tropical ... Describió al protista Blastocystis hominis y a la ameba Entamoeba dispar. ... entamoeba.lshtm.ac.uk/brumpt.htm http://www.pathexo.fr/pages/english/ObEBrump.html BRUMPT Émile Archivado el 6 de marzo de 2016 ...
... incluye infección por Entamoeba histolytica; ameboma Excluye otras parasitosis intestinales (A07) (A07) Otras enfermedades ...
On the Morphology of Entamoeba Bovis. Ed. University of California press glenn arthur Noble, elmer ray Noble. 1982. ...
Esta enzima se encuentra en el parásito Entamoeba histolytica. Enlaces para la enzima que utiliza ADP/ATP. ExPASy PROSITE ...
1976). The rhabdoviruses of Entamoeba histolytica and Entamoeba invadens. Fan Mu,Bo Li, Shufen Cheng, Jichun Jia, Daohong Jiang ...
... es una ameba relacionada con el género Entamoeba. Es un parásito comensal exclusivo del intestino humano, ...
En humanos, el amebozoo Entamoeba histolytica puede fagocitar glóbulos rojos. Los ciliados también participan en la fagocitosis ...
Las mitosomas se encontraron primeramente en Entamoeba histolytica, un parásito intestinal de los seres humanos.[1]​[2]​ ... Ghosh, S., Field, J., Rogers, R., Hickman, M. & Samuelson, J. (2000). The Entamoeba histolytica mitochondrion-derived organelle ... Leon-Avila, G. & Tovar, J. (2004). Mitosomes of Entamoeba histolytica are abundant mitochondrion-related remnant organelles ... Analysis of genes of mitochondrial origin in the genus Entamoeba. J. Eukaryotic Microbiology 50, 210-214. Vivares, C. P. (2002 ...
La Entamoeba histolytica es un parásito que se encuentra en todas las regiones del mundo y causa abscesos hepáticos en adultos ... causado por el parásito Entamoeba histolytica. Absceso hepático fúngico, principalmente causado por especies del hongo Candida ...
Pelomyxa y Entamoeba). El grupo incluye entre otros a los mixomicetos y a Entamoeba histolytica. Cavalier-Smith, T. (2013). ... Entamoeba, and Mastigamoeba». Proc. Natl. Acad. Sci. U.S.A. 99 (3): 1414-9. PMC 122205. PMID 11830664. doi:10.1073/pnas. ...
Entamoeba histolytica Quiste de Entamoeba histolytica Pelomyxa palustris Archezoa Ptáčková, E., Kostygov, A. Y., Chistyakova, L ... La ausencia de aparato de Golgi en Pelomyxa también es considerada primitiva, lo que la separaría de Entamoeba, que sí lo tiene ... Comprende únicamente el género Entamoeba, que causa la disentería amébica en humanos. Son endosimbióticos y carecen de flagelos ... Algunos géneros como Entamoeba y Endolimax son parásitos o comensales internos de animales y humanos, causando enfermedades ...
Entamoeba hartmanni (Archamoebea), hábitat: luz del intestino grueso; Entamoeba gingivalis (Archamoebea), hábitat: cavidad ... Destacan los géneros Entamoeba y Endolimax que son comensales o parásitos internos de animales. Otras especies viven en medios ... Algunas de las amebas comensales y de vida libre más importantes en medicina y epidemiología, incluyen: Entamoeba coli ( ... Debido a su gran parecido con la patogénica Entamoeba histolytica, es de importancia saber reconocer las diferencias ...
De igual forma estudia la biología celular y morfología comparativa entre Entamoeba histolytica y Entamoeba dispar. Su equipo ... The cytoskeleton of Entamoeba histolytica: structure, function, and regulation by signaling pathways. I Meza, P Talamás-Rohana ... Isolation of a 220-Kilodalton Protein With Lectin Properties From a Virulent Strain of Entamoeba histolytica. JL Rosales-Encina ... particularmente en Entamoeba histolytica y Leishmania mexicana. Desde 2009 la mayor parte de sus investigaciones se centran en ...
Entamoeba histolytica: a novel cysteine protease and an adhesin form the 112kDa surface protein. Molecular Microbiology, 33(3 ... A high-throughput drug screen for Entamoeba histolytica identifies a new lead and target. Nature medicine, 18(6), 956-960. ... histolytica Organización del genoma amebiano Moléculas y genes que participan en la fagocitosis de Entamoeba histolytica El ... Biología molecular de los factores de virulencia de Entamoeba histolytica Biología y genética molecular de la multirresistencia ...
La disentería amébica debido a la Entamoeba histolytica es una causa importante de diarrea sangrante en viajeros y también, a ... La disentería es un síntoma de shigelosis, de infección por Entamoeba histolytica y de salmonelosis. La malabsorción es una ...
Entamoeba histolytica es la causa de la amebiasis y parece ser capaz de producir meiosis. Las algas unicelulares son autótrofas ...
... como las causadas por Entamoeba histolytica, también pueden causar colitis. La colitis indeterminada es la clasificación para ...
Entamoeba, Iodamoeba, and Endolimax. Protist, 164(3), 380-410. Cavalier-Smith T (agosto de 1998). «A revised six-kingdom system ...
De éstas, la más importante es Entamoeba histolytica, que causa la amebiasis o disentería amebiana. Las amebas de los géneros ...
Entamoeba, Iodamoeba, and Endolimax. Protist, 164(3), 380-410. Cepicka, I. (2011). Rhizomastix biflagellata sp. nov., a new ...
Infecciones parasitarias debido a Entamoeba histolytica y Giardia lamblia (Giardiasis) pudiendo estar acompañado de iodoquinol ...
Muchos de ellos estaban infectados con Trichuris, Entamoeba, Ascaris, Capillaria, oxiuros, Bertiella y Endolimax nana.[39]​ Una ...
Entamoeba gingivalis Entamoeba histolytica Entamoeba coli Cavalier-Smith T (agosto de 1998). «A revised six-kingdom system of ... doi:10.1016/0303-2647(91)90010-I. Datos: Q518891 Multimedia: Entamoeba / Q518891 Especies: Entamoeba (Parásitos, Archamoebae). ... Entamoeba es un género de amebas del filo Amoebozoa y clase Archamoebae incluido en su propia familia, Entamoebidae. Al igual ... Además, todas las especies de este género (a excepción de la Entamoeba gingivalis) presentan una fase quística, donde se ...
... es un protozoo que pertenece al filo Sarcomastigophora. ... Entamoeba histolytica. 2019. * Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST). Notas Técnicas de Prevención. NTP ... Entamoeba histolytica: E. histolytica, E. dispar. 2020. * Centers for Disease Control and Prevention (CDC). Biosafety in ... Entamoeba histolytica es un protozoo que pertenece al filo Sarcomastigophora. Su ciclo de vida comprende dos estadios: la forma ...
Entamoeba coli: especie que se parece a E. histolytica, pero no es patógena y se encuentra en el tracto intestinal humano (*) ... Entamoeba gingivalis: especie que se encuentra en la boca alrededor de las encías humanas. Del 25 al 33% de las personas sanas ... Entamoeba: Género de amebas del orden Amoebida, clase Rhizopoda, parásitos de los vertebrados y que se distinguen por un núcleo ... Entamoeba hartmanni: especie más pequeña, pero por lo demás semejante a E. histolytica; es un microorganismo no patógeno que se ...
Sarcodinos, o amebas, p. ej., Entamoeba. *Mastigóforos, o flagelados, p. ej., Giardia, Leishmania ...
La lectina de Entamoeba Histolytica se ha involucrado de manera importante en la patogenia de la amibiasis y se cree que ... The Entamoeba histolytica Gal/GalNAc lectin is an important molecule involved in the pathogenesis of amoebiasis. It plays a ... Daño a los hepatocitos por lectina inhibible por D-Galactosa/N-Acetil D-Galactosamina de Entamoeba Histolytica. ... role in the adherence of Entamoeba histolytica trophozoites to the target cells. Moreover, the lectin can damage directly the ...
Entamoeba histolytica. 2. Enterobius vermicularis. 2. Enterocytozoon bieneusi. 2. Fasciola gigantica. 2. ...
A pesar de que ambas compartan abreviatura, no se debe confundir la bacteria Escherichia coli con la ameba Entamoeba coli (E. ... Para el protozoario con la misma abreviatura, véase Entamoeba coli. .mw-parser-output .infobox .imagen{max-width:100%;margin:0 ...
Entamoeba histolytica: encuadramiento taxonómico, morfología, ciclo biológico y epidemiología. Estudio de las amebas de vida ...
Entamoeba histolytica Capítulo 136. Sarcodarios de vida libre como patógenos del humano ...
Entamoeba coli, Entamoeba hartmanni, y el profesor los objetivos - Retroproyector. protozoarios intestinales y Iodamoeba y ... Trichomonas tenax, Entamoeba gingivalis: consulta del profesor, a - Pupitre. comensales de la cavidad bucal. Caracteres fin de ... 2.-Diferenciar, en base a criterios Entamoeba histolytica. Taxonomía. unidad. - Tiza. morfológicos y biológicos, las Morfología ...
El resultado de la prueba se reporta como sigue: "Entamoeba histolytica trofozoítos presentes. " A partir del diagnóstico de la ...
Amebas comensales y amebas de vida libre entamoeba von Amebas comensales y amebas de vida libre entamoeba hospital dr manuel ... úlceras intestinales en forma de botón de camisa, similares a las de la Entamoeba histolytica. • El signo típico es la diarrea ... Profilaxis La profilaxis es la misma que para Entamoeba histolytica, pero hay que ir con especial cuidado en trabajos en ...
17.83%) y el Complejo Entamoeba (7.83%). No se identificaron muestras con Cystoisospora belli.Conclusiones: Hubo un aumento en ...
Es una hidroxiquinoleína halogenada-8-hidroxidiyodoquinoleína activa sobre la forma móvil y los quistes de Entamoeba ...
6 Entamoeba histolytica (protozoos): En los productos frescos contaminados con quistes.. 7 Trichinella spiralis (gusano del ...
La amebiasis es una enfermedad parasitaria causada por una ameba conocida como Entamoeba histolytica, que suele alojarse en el ...
01-09-2004 Parasitología (P-2/04): Huevos del género Taenia (T. saginata) y quistes de Entamoeba coli y Blastocystis hominis. ...
Es una infección intestinal causada por el parásito microscópico Entamoeba histolytica que puede vivir en el intestino grueso ( ...
La amebiasis o amibiasis es una infección intestinal causada por la ameba Entamoeba histolytica. Cualquier persona puede ...
Entamoeba hystolitica, Tricomonas vaginalis, A. lumbricoides. La nitazoxanida actúa sobre los protozoos y bacterias anaerobias ...
y Entamoeba histolytica Amebiasis La amebiasis es la infección por Entamoeba histolytica. Se adquiere por transmisión fecal- ... Entamoeba histolytica (véase Amebiasis Amebiasis La amebiasis es la infección por Entamoeba histolytica. Se adquiere por ... véase Amebiasis Amebiasis La amebiasis es la infección por Entamoeba histolytica. Se adquiere por transmisión fecal-oral. En ...
y Entamoeba sp. en excretas de cucarachas de centros de abastos públicos en Cusco 2018  Moreano Briceño, Shally; Velasquez ...
Entamoeba histolytica: Erythrocyte phagocytosis and capture distance. Zerpa-Larrauri, R., Soto, A. & Espinoza-Blanco, Y., 1 ene ...
New Entamoeba group in howler monkeys (Alouatta spp.) associated with parasites of reptiles. Villanueva-García, Claudia; ...
... como la Entamoeba gingivalis). Además de disfrutar de un clima ideal, estos organismos también se benefician ya que reciben una ...
ENTAMOEBA HISTOLYTICA La amibiasis se define como la infección producida por Entamoeba histolytica, parásito protozoo ... La Entamoeba histiolytica se disemina a través de agua o alimentos contaminados con heces. Esta contaminación es común cuando ... La Entamoeba histiolytica puede vivir en el intestino grueso (colon) sin causar daño; sin embargo, algunas veces invade la ...
Participación de Rab21 en el tráfico vesicular de Entamoeba histolytica. *Posted on 15 diciembre, 2020. 4 enero, 2021. ...
PARASITOLOGÍA,Amebiasis, Entamoeba histolytica: manifestaciones clínicas y diagnóstico (Parte 2). ¡Saludo a los Amigos de ...

No hay FAQ disponibles para "entamoeba"

No hay imágenes disponibles para "entamoeba"