Más allá del paper, mi hipótesis, Lindhal, sería que la estructura del gasto social es resultado de la desigualdad, no forma parte de ningún diseño de políticas públicas para reducirla, incluida la era K. Como más crece la desigualdad, más crece la
pobreza y la fragmentación social, y es inevitable que el estado tenga que poner más esfuerzo en las políticas de contención del pauperismo y los efectos de la fragmentación social.´Políticas de contención quizá sería un nombre más apropiado que políticas sociales, que serían algo más serio que lo que se hizo en los 90 y se sigue haciendo ahora, con un esquema bastante parecido. El gasto social serviría meramente para gestionar la
pobreza, así como la fragmentación social y sus ramificaciones, no para compensar nada. El esquema no se basa en ninguna red básica de seguridad socioeconómica, ningún piso social universal, ni tampoco existe ninguna planificación orientada a que la educación, la
salud y las jubilaciones ...