Los
antígenos que van a ser presentados por vía CMH-II suelen ser
proteínas extracelulares. Las moléculas del CMH-II se unen a los fragmentos peptídicos que derivan de ella, una vez que han sido fagocitadas o internalizadas dentro de la célula y procesadas mediante proteasas en compartimentos acídicos endosomales/lisosomales. El complejo CMH-II/péptido, así formado, es extremadamente estable y puede estar en la superficie celular durante días. Previamente a esta asociación, ha tenido lugar la liberación de la cadena invariante, unida a las moléculas del CMH-II, desde su síntesis en el RE. En esta vía de presentación, los
péptidos pueden unirse a moléculas CMH-II de nueva síntesis, liberadas de su cadena invariante, al fusionarse las vesículas que las almacenan con aquellas donde ha tenido lugar el procesamiento de antígeno.
Péptidos derivados del procesamiento del antígeno podrían unirse también moléculas CMH-II recicladas desde la superficie celular y, una vez que se ...