Vesícula Biliar
Enfermedades de la Vesícula Biliar
La colecistografía es una prueba de diagnóstico por imágenes que se utiliza para evaluar el estado de la vesícula biliar y los conductos biliares. Consiste en la administración de un medio de contraste, generalmente a través de la ingesta oral, que se concentra en la bilis y permite visualizar la vesícula biliar y los conductos biliares en una radiografía o en una imagen de tomografía computarizada (TAC).
Existen dos tipos principales de colecistografía: la colecistografía oral y la colecistografía intravenosa. La colecistografía oral es el tipo más común y se realiza mediante la ingesta de un agente de contraste que contiene yodo, como el ioversol o el iopanoico, seguido de una serie de radiografías tomadas a intervalos regulares durante varias horas. La colecistografía intravenosa, por otro lado, implica la inyección del agente de contraste directamente en la vena y se utiliza con menor frecuencia que la colecistografía oral.
La colecistografía puede ayudar a diagnosticar diversas afecciones de la vesícula biliar, como la colelitiasis (presencia de cálculos biliares), la colangitis (inflamación de los conductos biliares) o el cáncer de vesícula biliar. Sin embargo, esta prueba ha sido parcialmente reemplazada por otras técnicas de imagen más modernas y menos invasivas, como la ecografía o la tomografía computarizada, que no requieren la administración de un medio de contraste y ofrecen imágenes más nítidas y precisas.
La vesícula biliar, en términos médicos, es un órgano pequeño, generally sac-like, ubicado debajo del hígado en el lado derecho del abdomen. Su principal función es almacenar y concentrar la bilis, un líquido producido por el hígado que ayuda a descomponer las grasas durante la digestión.
Después de una comida, específicamente aquellos que contienen grasas, la vesícula biliar se contrae y expulsa la bilis al duodeno a través del conducto colédoco para ayudar en la digestión de las grasas. La vesícula bílis está compuesta por pequeñas fibras musculares en su pared que le permiten contraerse y relajarse.
Es importante mencionar que aunque la vesícula biliar desempeña un rol crucial en el proceso digestivo, no es esencial para la vida humana. Algunas personas pueden vivir sin ella si se ha extirpado quirúrgicamente, una operación conocida como colecistectomía, ya sea de forma laparoscópica o abierta. Esto puede ser necesario en casos de cálculos biliares, inflamación de la vesícula biliar (colecistitis) u otros trastornos relacionados con este órgano.
Las enfermedades de la vesícula biliar se refieren a un grupo de trastornos que afectan la vesícula biliar, un pequeño saco situado justo debajo del hígado que almacena y concentra la bilis, una sustancia producida por el hígado que ayuda en la digestión de las grasas. Las enfermedades más comunes de la vesícula biliar incluyen:
1. Colelitiasis: Es la formación de cálculos o piedras en la vesícula biliar. Estas piedras pueden ser tan pequeñas como un grano de arena o tan grandes como una pelota de golf. La mayoría de las personas con colelitiasis no presentan síntomas, pero algunas desarrollan dolor abdominal intenso en la parte superior derecha del abdomen, especialmente después de comer alimentos grasosos.
2. Colecistitis: Es la inflamación de la vesícula biliar, que generalmente ocurre como resultado de un bloqueo en el flujo de bilis hacia el intestino delgado. La colecistitis aguda puede causar dolor abdominal intenso, fiebre y náuseas. Si no se trata, puede provocar complicaciones graves, como infección o perforación de la vesícula biliar.
3. Colangitis: Es la inflamación de los conductos biliares, los tubos que transportan la bilis desde el hígado hasta la vesícula biliar y el intestino delgado. La colangitis puede ocurrir como resultado de una infección o un bloqueo en los conductos biliares. Los síntomas pueden incluir dolor abdominal, fiebre, escalofríos y coloración oscura de la orina o las heces.
4. Quiste de vesícula biliar: Es una bolsa llena de líquido que se forma en la pared de la vesícula biliar. La mayoría de los quistes de vesícula biliar no causan síntomas, pero algunos pueden causar dolor abdominal o infección.
5. Cáncer de vesícula biliar: Es un cáncer raro que se desarrolla en la pared de la vesícula biliar. Los síntomas pueden incluir dolor abdominal, ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos), pérdida de apetito y pérdida de peso. El cáncer de vesícula biliar generalmente se diagnostica en etapas avanzadas y tiene un pronóstico desfavorable.
La colelitiasis es una afección médica en la que se forman cálculos o piedras en la vesícula biliar. La vesícula biliar es un pequeño órgano situado bajo el hígado que almacena y libera bilis, una sustancia líquida que ayuda a descomponer las grasas durante la digestión.
Las piedras en la vesícula biliar pueden variar en tamaño, desde pequeños granos de arena hasta bolas del tamaño de una pelota de golf. Algunas personas con colelitiasis no presentan síntomas y pueden desconocer que tienen piedras en la vesícula biliar hasta que se realizan pruebas de imagen por otras razones.
Sin embargo, otros pueden experimentar dolor intenso en el abdomen superior derecho o en el centro del abdomen, especialmente después de comer alimentos grasosos. El dolor puede durar desde unos minutos hasta varias horas y a veces se irradia hacia el hombro derecho. Otras personas pueden experimentar síntomas como náuseas, vómitos, pérdida de apetito, fatiga o fiebre leve.
El tratamiento de la colelitiasis depende del tamaño y la ubicación de las piedras, así como de los síntomas experimentados por el paciente. En algunos casos, se pueden administrar medicamentos para disolver las piedras o se puede recomendar una dieta baja en grasas. Sin embargo, si las piedras son grandes o causan complicaciones, como inflamación de la vesícula biliar o infección, es posible que sea necesaria una cirugía para extirpar la vesícula biliar (colecistectomía).