Cisterna Magna
Cuarto Ventrículo
Síndrome de Dandy-Walker
Vasoespasmo Intracraneal
Espacio Subaracnoideo
Paraparesia Espástica
Hemorragia Subaracnoidea
Arteria Basilar
Platibasia
Ventrículos Cerebrales
Malformación de Arnold-Chiari
Líquido Cefalorraquídeo
Inyecciones Espinales
Tabique del Cerebro
Ecoencefalografía
Presión Intracraneal
Siringomielia
Fosa Craneal Posterior
Aparato de Golgi
Ultrasonografía Prenatal
Enfermedades Fetales
Hidrocefalia
Fasciolidae
Perros
Segundo Trimestre del Embarazo
Gatos
Conejos
Microscopía Electrónica
Encéfalo
Enciclopedias como Asunto
Meninges
Medicina Naval
Habénula
La cisterna magna es una estructura anatómica en el cerebro que forma parte del espacio subaracnoideo, donde se encuentra el líquido cefalorraquídeo (LCR). Se localiza en la base del cráneo, justo por encima de la médula oblonga y debajo del cerebelo. La cisterna magna contiene una cantidad considerable de LCR y es el sitio donde se encuentran varios vasos sanguíneos importantes, como la vena jugular interna y las arterias vertebrales anteriores. También alberga estructuras nerviosas vitales, como los nervios craneales IX a XII. La cisterna magna es un área clave en el sistema nervioso central y desempeña un papel importante en la circulación del LCR y la protección de las estructuras neurológicas circundantes.
El cuarto ventrículo es una cavidad remanente del tubo neural en el sistema ventricular cerebral. Se encuentra en la parte posterior y inferior del tronco encefálico, conectando el tercer ventrículo a través del acueducto de Sylvius y drenando el líquido cefalorraquídeo (LCR) hacia el conducto cerebral posterior y los espacios subaracnoideos a través de los forámenes de Luschka y Magendie. El cuarto ventrículo tiene forma de pirámide y está limitado por el techo del bulbo raquídeo, el puente, el cerebelo y la membrana tectal. La glándula pineal se encuentra en su parte superior.
El Síndrome de Dandy-Walker es un trastorno congénito del sistema nervioso central que afecta la parte inferior del cerebro llamada cerebelo y el espacio que lo rodea (cuenca vermiana). Los síntomas pueden variar desde leves hasta graves, dependiendo de la extensión de las anomalías estructurales.
Las características principales del síndrome incluyen:
1. Hipoplasia o agenesia del vermis cerebeloso (parte central del cerebelo): Esto significa que el vermis no se ha desarrollado completamente o está ausente.
2. Dilatación del IV ventrículo: El cuarto ventrículo, una cavidad llena de líquido dentro del cerebro, se agranda porque el flujo de líquido cefalorraquídeo (LCR) está obstruido por la malformación cerebelosa.
3. Aumento de la tensión en el cráneo: La dilatación del IV ventrículo puede conducir a un aumento de la presión intracraneal y una protuberancia occipital (una hinchazón visible en la parte posterior de la cabeza).
Otros síntomas asociados con el Síndrome de Dandy-Walker pueden incluir:
- Retraso en el desarrollo
- Discapacidad intelectual
- Ataxia (dificultad para coordinar movimientos musculares)
- Nistagmo (movimientos involuntarios y anormales de los ojos)
- Hidrocefalia (exceso de líquido en el cerebro)
- Convulsiones
- Problemas auditivos, incluyendo sordera
El diagnóstico del Síndrome de Dandy-Walker generalmente se realiza mediante estudios de imagenología, como una resonancia magnética (RM) o tomografía computarizada (TC) del cerebro. El tratamiento suele implicar la descompresión quirúrgica del IV ventrículo para aliviar la presión intracraneal y prevenir daños adicionales al cerebro. La fisioterapia, la terapia del habla y otras intervenciones de apoyo también pueden ser necesarias para ayudar a los niños afectados a desarrollarse y adaptarse a sus limitaciones funcionales.
El vasoespasmo intracraneal es una complicación que puede ocurrir después de un procedimiento de clipado de aneurisma o después de un accidente cerebrovascular hemorrágico. Se caracteriza por el espasmo y la estrechamiento de los vasos sanguíneos en el cerebro, lo que puede disminuir el flujo sanguíneo y causar isquemia o infarto cerebral. Los síntomas pueden incluir dolor de cabeza, convulsiones, déficits neurológicos focales y, en casos graves, coma o muerte. El tratamiento puede incluir medicamentos para dilatar los vasos sanguíneos, como la nimodipina, y, en algunos casos, intervenciones quirúrgicas para aliviar el espasmo.
El espacio subaracnoides es un espacio anatómico dentro del sistema nervioso central. Se encuentra entre las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal, llamadas meninges. Más específicamente, se localiza entre la piamadre (la meninge más interna que está en contacto directo con la superficie del cerebro y la médula espinal) y la aracnoides (una membrana delgada y aterciopelada).
Este espacio contiene líquido cefalorraquídeo (LCR), un fluido claro y transparente que actúa como amortiguador protegiendo al cerebro y la médula espinal de posibles traumatismos. Además, el LCR también desempeña funciones importantes en el intercambio metabólico entre el sistema nervioso central y el torrente sanguíneo, así como en la eliminación de desechos metabólicos.
Es importante mencionar que ciertas condiciones clínicas pueden afectar al espacio subaracnoides, como las hemorragias subaracnoideas (sangrado en este espacio) o la meningitis (infección de las meninges), las cuales requieren atención médica inmediata.
La paraparesia espástica es un término médico que se utiliza para describir una afección del sistema nervioso en la cual el paciente experimenta rigidez muscular y debilidad en las piernas. A menudo, también hay problemas con el control de los movimientos y la coordinación. La palabra "paraparesia" significa parcial o incompleta parálisis de dos lados del cuerpo (generalmente las piernas), mientras que "espástica" se refiere al tipo de rigidez muscular involucrada, que es el resultado de un espasmo muscular excesivo e involuntario.
Esta afección puede ser causada por una variedad de factores subyacentes, incluyendo lesiones en la médula espinal, esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson, esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y otras enfermedades neurológicas. El tratamiento depende de la causa subyacente y puede incluir fisioterapia, medicamentos para relajar los músculos y aliviar el espasmo, o cirugía en casos graves.
La hemorragia subaracnoidea (HSA) es un tipo específico de hemorragia intracraneal donde se produce un sangrado en el espacio subaracnoideo, que es el espacio entre las membranas que rodean al cerebro. Este espacio está lleno de líquido cefalorraquídeo (LCR) y normalmente proporciona protección al cerebro.
La causa más común de una HSA es la rotura de un aneurisma cerebral, una dilatación localizada y debilitada en una arteria cerebral. Otras causas menos frecuentes pueden incluir traumatismos craneales graves, malformaciones vasculares, tumores cerebrales o infecciones.
Los síntomas más comunes de una HSA incluyen dolor de cabeza intenso y repentino (conocido como "el peor dolor de cabeza de mi vida"), rigidez en el cuello, vómitos, alteraciones visuales, sensibilidad a la luz, convulsiones, confusión, somnolencia o coma. La HSA es una condición médica grave y potencialmente letal que requiere atención inmediiata y tratamiento en un centro médico especializado. El tratamiento puede incluir cirugía para reparar el aneurisma roto, control de la presión intracraneal, manejo de las convulsiones y prevención de complicaciones como la hidrocefalia o el vasoespasmo cerebral.
La arteria basilar es una arteria importante en el cerebro. Se forma por la fusión de las dos arterias vertebrales y recorre la parte inferior del tronco encefálico, un área de conexiones nerviosas cruciales entre el cerebro y la médula espinal. La arteria basilar suministra sangre a la protuberancia y el bulbo raquídeo, así como al lóbulo occipital y a partes del cerebelo. También da lugar a varias arterias cerebrales pequeñas que irrigan diferentes áreas del cerebro. La disfunción o bloqueo de la arteria basilar puede resultar en graves consecuencias neurológicas, como accidentes cerebrovasculares (ACV) o trastornos de la conciencia.
La platibasia es una condición médica rara y generalmente asintomática en la que el occipital de la base del cráneo se encuentra significativamente desplazado hacia atrás o inclinado, lo que hace que el foramen magnum (el agujero grande en la parte posterior de la base del cráneo) sea más grande de lo normal. Esta condición puede observarse en algunas personas con anomalías congénitas o trastornos genéticos, como la acondroplasia, que es el tipo más común de enanismo. En la mayoría de los casos, la platibasia no causa ningún problema y no requiere tratamiento. Sin embargo, en algunas personas, especialmente aquellas con otras anomalías craneales o espinales, la platibasia puede aumentar el riesgo de complicaciones, como la compresión de la médula espinal o los nervios raquídeos, lo que podría causar dolor de cuello, rigidez, debilidad muscular o problemas de control de vejiga e intestinos. En estos casos, el tratamiento puede incluir cirugía para corregir la posición del occipital y aliviar la presión sobre los tejidos circundantes.
Los ventrículos cerebrales son cavidades o espacios llenos de líquido dentro del cerebro. Hay cuatro ventrículos en total: dos ventrículos laterales en cada hemisferio cerebral, el tercer ventrículo en el centro del cerebro y el cuarto ventrículo más cercano al tronco encefálico.
Estos ventrículos están conectados entre sí por pequeños conductos y contienen líquido cefalorraquídeo (LCR), que protege al cerebro y la médula espinal de lesiones y infecciones, mantiene la estabilidad del entorno neurológico y proporciona nutrientes a las células nerviosas.
El líquido cefalorraquídeo se produce en los ventrículos laterales, fluye hacia el tercer ventrículo a través del foramen de Monro, llena el cuarto ventrículo después de pasar por el acueducto cerebral y finalmente sale al espacio subaracnoides que rodea el cerebro y la médula espinal a través de los conductos de Luschka y Magendie.
La alteración en el tamaño o forma de los ventrículos cerebrales puede ser un signo de diversas condiciones neurológicas, como hidrocefalia, tumores cerebrales o enfermedades neurodegenerativas.
La Malformación de Arnold-Chiari, también conocida como Síndrome de Chiari o Malformación de Chiari I, es un trastorno estructural del cerebelo y la médula espinal. En esta afección, parte del cerebelo y el tronco del encéfalo descienden hacia la cavidad superior del canal raquídeo, en la parte posterior del cráneo. Esto puede ejercer presión sobre el cerebro y el tronco encefálico e interferir con los fluidos que rodean y protegen al cerebro y la médula espinal.
Existen varios tipos de malformaciones de Chiari, siendo la Malformación de Chiari I la más común. La Malformación de Arnold-Chiari se caracteriza por el desplazamiento herniario del vermis cerebeloso y/o los lóbulos inferiores cerebelosos a través del foramen magnum, que es el orificio entre el cráneo y la columna vertebral donde pasa la médula espinal.
Esta malformación puede causar una variedad de síntomas, como dolores de cabeza, problemas de equilibrio y coordinación, dificultades para tragar, entumecimiento o debilidad en las extremidades, mareos, visión doble y, en casos graves, parálisis. El tratamiento puede incluir medidas conservadoras, como el uso de analgésicos y fisioterapia, pero en algunos casos puede requerir una intervención quirúrgica para aliviar la presión sobre el cerebro y la médula espinal.
El líquido cefalorraquídeo (LCR) es un fluido claro y estéril que circula en el espacio subaracnoideo del sistema nervioso central, rodeando el cerebro y la médula espinal. Este líquido cumple varias funciones vitales, entre ellas:
1. Protección mecánica: El LCR actúa como un cojín que amortigua los golpes y protege al cerebro y la médula espinal de traumatismos o lesiones.
2. Homeostasis del medio interno: Ayuda a mantener un entorno constante dentro del sistema nervioso central, regulando la presión intracraneal y el pH, así como los niveles de glucosa y sales minerales.
3. Transporte de nutrientes y eliminación de desechos: El LCR transporta nutrientes desde la sangre hacia las células nerviosas y lleva desechos metabólicos lejos de ellas, lo que ayuda a mantener un ambiente saludable para el correcto funcionamiento del sistema nervioso central.
4. Barrera protectora: El LCR forma parte de la barrera hematoencefálica, que separa el tejido cerebral del torrente sanguíneo y regula el paso de sustancias entre ambos.
El líquido cefalorraquídeo se produce en los ventrículos cerebrales por las células epiteliales del plexo coroides, y luego fluye hacia el espacio subaracnoideo a través de conductos especializados llamados aqueductos. Después, el LCR es reabsorbido en la sangre a través de los senos venosos durales gracias al proceso de absorción activa llevado a cabo por las células endoteliales de los vasos sanguíneos. La producción y reabsorción de LCR es un proceso continuo que ayuda a mantener su volumen y composición constantes.
Una inyección intraventricular es un procedimiento médico en el que se introduce un medicamento directamente en los ventrículos cerebrales, que son espacios llenos de líquido dentro del cerebro. Este tipo de administración de fármacos se utiliza a menudo en el tratamiento de diversas condiciones neurológicas, como la meningitis, la encefalitis, los tumores cerebrales y otras afecciones que pueden provocar un aumento de la presión intracraneal.
El procedimiento implica la inserción de una aguja especialmente diseñada a través del cráneo hasta el ventrículo cerebral, donde se administra el medicamento. La elección de este método de administración permite que los fármacos alcancen directamente el sitio de acción y, por lo tanto, pueden lograr concentraciones más altas en el cerebro, reduciendo así los efectos secundarios sistémicos y mejorando la eficacia del tratamiento.
Sin embargo, las inyecciones intraventriculares también conllevan riesgos, como infección, sangrado y daño al tejido cerebral. Por lo tanto, este procedimiento solo se realiza bajo estrictas precauciones y en un entorno hospitalario especializado, generalmente en el cuidado intensivo neurológico o neurocirugía.
Una inyección espinal, también conocida como bloqueo nervioso epidural o simplemente bloqueo epidural, es un procedimiento en el que se inyecta un anestésico local, usualmente combinado con un corticosteroide, en el espacio epidural de la columna vertebral. El espacio epidural es el área que rodea la médula espinal y contiene los nervios raquídeos.
Este procedimiento se utiliza a menudo para aliviar el dolor causado por condiciones como hernias discales, ciática, síndrome de dolor facetario, espondilolistesis y otras afecciones de la columna vertebral. También se puede usar durante el parto para aliviar el dolor del trabajo de parto y el parto.
La inyección generalmente se administra en el área lumbar de la espalda, pero también puede administrarse en el cuello o la parte media de la espalda, dependiendo de dónde esté localizado el dolor. El medicamento bloquea los nervios que transmiten señales de dolor al cerebro, lo que puede proporcionar alivio temporal o incluso permanente del dolor.
Como con cualquier procedimiento médico, existen riesgos e inconvenientes asociados con las inyecciones espinales, como dolor en el sitio de la inyección, infección, daño a los nervios y, raramente, parálisis. Es importante discutir estos riesgos con un médico antes de decidir si una inyección espinal es adecuada para un individuo en particular.
El tabique del cerebro, también conocido como septum pellucidum, es una delgada membrana compuesta principalmente de tejido conectivo que divide los dos ventrículos laterales del cerebro en el cuerpo calloso. Es una estructura normal presente en la mayoría de los cerebros humanos y desempeña un papel importante en el flujo de líquido cefalorraquídeo (LCR) dentro del sistema ventricular del cerebro. Aunque a menudo se describe como una estructura doble, está compuesta por dos láminas finas de tejido conectivo que se unen y forman una partición entre los dos ventrículos laterales.
La integridad estructural del tabique del cerebro es importante para el funcionamiento normal del sistema nervioso central. Algunas afecciones médicas, como lesiones traumáticas o enfermedades neurológicas, pueden causar anomalías o daños en el tabique del cerebro, lo que puede dar lugar a diversos síntomas y complicaciones clínicas. Por ejemplo, un tabique del cerebro agrandado o desgarrado puede interrumpir el flujo normal de LCR, lo que podría conducir al desarrollo de la hidrocefalia, una afección caracterizada por un exceso de líquido en los ventrículos del cerebro.
La ecoencefalografía (EEG), también conocida como ecografía del feto cerebral, es un procedimiento diagnóstico no invasivo que utiliza ultrasonido para producir imágenes del cerebro de un feto en desarrollo. Durante el examen, un transductor o una sonda de ultrasonido se coloca sobre el vientre materno y envía ondas sonoras de alta frecuencia a través del tejido corporal. Estas ondas rebotan en los límites entre diferentes tejidos para crear "ecos" que se recopilan por la sonda y enviados a un procesador de señales, donde se convierten en imágenes en movimiento del cerebro fetal.
La EEG se utiliza principalmente durante el segundo y tercer trimestre del embarazo para evaluar posibles anomalías estructurales del cerebro fetal, como la ventriculomegalia (dilatación de los ventrículos cerebrales), la hemorragia cerebral o el agrandamiento de los espacios subaracnoideos. También puede ayudar a detectar trastornos metabólicos y genéticos, como el síndrome de Down. Además, se puede usar para monitorear la actividad cerebral fetal durante el trabajo de parto y el parto, especialmente en bebés prematuros o con riesgo de sufrir daño cerebral hipóxico-isleмиaco.
Es importante mencionar que la EEG no emite radiación y es considerada segura para el feto y la madre. Sin embargo, como cualquier procedimiento diagnóstico, tiene limitaciones y puede no detectar todas las anomalías cerebrales fetales. Por lo tanto, se recomienda que los resultados de la EEG se interpreten junto con otros datos clínicos y pruebas diagnósticas.
La presión intracraneal (PIC) es la presión que existe dentro del cráneo en el espacio que contiene el cerebro, el líquido cefalorraquídeo (LCR) y los vasos sanguíneos. Bajo condiciones normales, esta presión se mantiene relativamente constante gracias a un sofisticado sistema de mecanismos reguladores. La PIC fisiológica normal varía con la edad, pero generalmente se considera que está entre 5-15 mmHg en reposo.
La PIC puede verse afectada por diversas condiciones médicas. Un aumento patológico de la PIC (llamado hipertensión intracraneal) puede ser causado por edema cerebral, hemorragia intracraneal, tumores cerebrales, infecciones como meningitis o abscesos cerebrales, hidrocefalia y otros trastornos. Los síntomas de una PIC alta pueden incluir dolores de cabeza, vómitos, alteraciones visuales, confusión, letargia e incluso coma en casos graves.
Por otro lado, una presión intracraneal baja (hipotensión intracraneal) también puede ser problemática y puede deberse a deshidratación, hemorragia subaracnoidea severa o por una disminución del volumen de líquido cefalorraquídeo. Los síntomas de una PIC baja pueden incluir letargia, rigidez de nuca, falta de coordinación, pupilas dilatadas e irreactivas y, en casos graves, parálisis o muerte.
El monitoreo de la PIC se realiza mediante diferentes métodos, como catéteres intraventriculares o sensores de fibra óptica, y es especialmente útil en el manejo de pacientes con traumatismos craneales graves, hemorragias subaracnoideas, meningitis, encefalitis, tumores cerebrales y otras afecciones neurológicas.
La siringomielia es una afección médica que involucra la formación de un quiste lleno de líquido en la médula espinal. Este quiste, llamado siringe, puede expandirse y comprimir gradualmente la médula espinal, resultando en diversos síntomas neurológicos dependiendo de dónde se encuentre el quiste y qué partes de la médula espinal estén afectadas.
Los síntomas comunes de la siringomielia incluyen dolor de espalda, rigidez y debilidad en los músculos, pérdida de sensibilidad o entumecimiento en las extremidades (manos y piernas), problemas de equilibrio y coordinación, y en casos graves, parálisis. La afección puede ser congénita (presente desde el nacimiento) o adquirida más tarde en la vida como resultado de una lesión en la columna vertebral, un tumor espinal o otras condiciones médicas que afecten el flujo del líquido cefalorraquídeo (LCR). El tratamiento puede incluir terapia conservadora, cirugía para drenar el quiste o estabilizar la columna vertebral, y fisioterapia para ayudar a gestionar los síntomas.
La fosa craneal posterior, también conocida como la fosa cerebral posterior o fosa cranial occipital, es una depresión profunda y curva en la base del cráneo. Es la fosa craneal más baja de las tres fosas (las otras son la fosa craneal anterior y la fosa craneal media) y se encuentra en la parte posterior del cerebro.
La fosa craneal posterior alberga principalmente el cerebelo, el tronco del encéfalo y la mayor parte del bulbo raquídeo. También contiene importantes estructuras vasculares como la vena jugular interna, la arteria vertebral y la arteria basilar. La fosa craneal posterior se define anatómicamente por los huesos que la forman, que incluyen el occipital, el temporal y el parietal.
El aparato de Golgi, también conocido como aparato de Golgi o complejo de Golgi, es una estructura intracelular membranosa presente en las células eucariotas. Está formado por una serie de sacos aplanados y vesículas conectadas llamados cisternas, que se organizan en forma de pilas.
El aparato de Golgi desempeña un papel fundamental en el procesamiento y transporte de proteínas y lípidos sintetizados en el retículo endoplásmico rugoso (RER) hacia su destino final dentro o fuera de la célula. Las proteínas son transportadas desde el RER hasta el aparato de Golgi en vesículas revestidas de coatomer (VRC).
Una vez en el aparato de Golgi, las proteínas sufren diversos procesos postraduccionales, como la glicosilación, fosforilación y sulfonación, así como también el plegamiento correcto y el emparejamiento con otras subunidades. Después de ser procesadas, las proteínas son empaquetadas en vesículas más pequeñas llamadas vesículas de secreción o transporte, que se dirigen hacia su destino final.
El aparato de Golgi también está involucrado en la formación de lisosomas, orgánulos especializados en la digestión celular, y en la síntesis de polisacáridos complejos presentes en la superficie celular y en la matriz extracelular.
En resumen, el aparato de Golgi es una estructura intracelular clave involucrada en el procesamiento, modificación y transporte de proteínas y lípidos hacia su destino final dentro o fuera de la célula.
Una inyección, también conocida como vacunación o immunización, es un procedimiento médico en el que un líquido, generalmente una solución o suspensión de medicamento, vitaminas, minerales u otras sustancias terapéuticas, se administra directamente en un tejido corporal, normalmente utilizando una aguja y una jeringa. Las inyecciones pueden administrarse en diferentes lugares del cuerpo, dependiendo de la dosis, el tipo de medicamento y la preferencia del médico o paciente. Algunos de los sitios comunes para las inyecciones incluyen los músculos (inyección intramuscular), debajo de la piel (inyección subcutánea) o directamente en una vena (inyección intravenosa). Las inyecciones se utilizan con frecuencia porque permiten que las sustancias activas se distribuyan rápidamente y eficazmente en el torrente sanguíneo, evitando los procesos de absorción que pueden retrasar o disminuir la biodisponibilidad del medicamento cuando se administra por vía oral. Además, las inyecciones pueden ser útiles para administrar fármacos que irritan el revestimiento gastrointestinal o son destruidos por los jugos digestivos.
La ultrasonografía prenatal, también conocida como ecografía obstétrica, es un procedimiento diagnóstico no invasivo que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para crear imágenes del feto en desarrollo, los órganos pélvicos maternos y el líquido amniótico. Se realiza mediante un transductor, o sonda, que se coloca sobre el abdomen de la madre después de aplicar un gel conductor.
Este procedimiento se utiliza comúnmente durante el embarazo para monitorear el crecimiento y desarrollo fetal, detectar anomalías congénitas, determinar la edad gestacional, identificar la posición del feto y confirmar la presencia de múltiples fetos. También puede utilizarse para guiar procedimientos invasivos como las biopsias de vellosidades coriónicas o las amniocentesis.
La ultrasonografía prenatal es generalmente segura y no se han reportado efectos adversos conocidos para el feto o la madre. Sin embargo, los resultados deben interpretarse con precaución, ya que hay limitaciones en su capacidad para detectar todas las anomalías fetales. La frecuencia y el momento de las ecografías prenatales varían según las recomendaciones del proveedor de atención médica y las preferencias de la madre.
Las enfermedades fetales se refieren a las condiciones médicas que afectan al feto durante el desarrollo embrionario o fetal dentro del útero materno. Estas enfermedades pueden ser causadas por diversos factores, como anomalías genéticas, infecciones, exposición a teratógenos (sustancias que dañan el desarrollo del feto), problemas placentarios o trastornos maternos.
Algunas enfermedades fetales pueden ser diagnosticadas antes del nacimiento mediante técnicas de diagnóstico prenatal, como ecografías, amniocentesis o muestras de vellosidades coriónicas. Entre las enfermedades fetales más comunes se encuentran:
1. Anencefalia: Es una malformación congénita grave en la que el cerebro y el cráneo del feto no se desarrollan correctamente, lo que resulta en la ausencia parcial o total del encéfalo.
2. Espina bífida: Trastorno neural del tubo que afecta al desarrollo de la columna vertebral y la médula espinal, provocando diversos grados de parálisis y problemas neurológicos.
3. Síndrome de Down: También conocido como trisomía 21, es una afección genética causada por la presencia de todo o parte del cromosoma 21 adicional, lo que da lugar a discapacidad intelectual leve a moderada y rasgos físicos distintivos.
4. Fibrosis quística: Es una enfermedad hereditaria que afecta a las glándulas exocrinas, provocando la acumulación de mucosidad espesa en los pulmones, hígado, páncreas e intestinos.
5. Síndrome de Turner: Afección genética que ocurre cuando una mujer nace con solo un cromosoma X, en lugar de dos (XX). Las personas afectadas suelen ser de estatura baja y presentar diversas anomalías físicas y reproductivas.
6. Hipospadias: Malformación congénita del pene que se caracteriza por la abertura uretral en una posición anormal, generalmente en el lado inferior o debajo del glande.
7. Labio leporino y paladar hendido: Defectos de nacimiento que afectan a los labios y/o al paladar, provocando aberturas anormales en estas áreas y dificultades para hablar, comer y beber.
8. Anencefalia: Afección grave del sistema nervioso central en la que el cerebro y el cráneo no se desarrollan correctamente, lo que suele provocar la muerte poco después del nacimiento.
9. Síndrome de Noonan: Trastorno genético que afecta al crecimiento y al desarrollo, causando rasgos faciales distintivos, problemas cardíacos y retrasos en el desarrollo.
10. Enfermedad de Hirschsprung: Afección congénita del intestino grueso que se caracteriza por la ausencia de células nerviosas en una parte o en toda la pared intestinal, lo que dificulta el paso de las heces y puede provocar obstrucciones.
La hidrocefalia es una afección médica en la cual se acumula un exceso de líquido cefalorraquídeo (LCR) en los espacios (ventrículos) dentro del cerebro. Este aumento de presión puede comprimir el tejido cerebral y dañar el cerebro.
El LCR es un líquido claro que circula alrededor del cerebro y la médula espinal, proporcionando protección y manteniendo en equilibrio la presión dentro de estas áreas. Cualquier condición que cause un bloqueo en el flujo normal del LCR o un aumento en la producción de este líquido puede resultar en hidrocefalia.
Los síntomas varían dependiendo de la edad del paciente y la causa subyacente, pero pueden incluir agrandamiento de la cabeza (en bebés), vómitos, irritabilidad, falta de apetito, ojos mirando hacia abajo (signo de "solenoide"), alteraciones en el crecimiento y desarrollo, dolores de cabeza, dificultad para caminar, convulsiones y cambios en el comportamiento o personalidad.
El tratamiento generalmente involucra la derivación quirúrgica del exceso de líquido cerebral Spencer a otro lugar del cuerpo donde pueda ser absorbido, como por ejemplo, los ventrículos peritoneales (derivación ventriculoperitoneal). En algunos casos, se pueden utilizar dispositivos endoscópicos para crear nuevos caminos para el flujo del LCR. El pronóstico depende de la causa subyacente y la gravedad de los daños cerebrales.
Fasciolidae es una familia de trematodos (gusanos planos parásitos) conocidos comúnmente como duelas. Los miembros más notables de esta familia son Fasciola hepatica y Fasciola gigantica, que causan la enfermedad conocida como fasciloliasis en humanos y animales domésticos. Estos parásitos tienen un ciclo de vida complejo que involucra a varios huéspedes intermedios y definitivos. Se encuentran principalmente en ambientes acuáticos y pastizales húmedos, donde infectan a los mamíferos, incluidos humanos, a través de la ingestión de vegetación contaminada con las formas larvarias del parásito. Los síntomas de la enfermedad varían desde molestias gastrointestinales leves hasta graves complicaciones hepáticas. El tratamiento generalmente implica el uso de antiparasitarios específicos, como triclabendazol.
Lo siento, parece que hubo un error en su pregunta. La palabra 'Perros' no está relacionada con ningún término médico específico. Si desea saber sobre el término "perro" desde un punto de vista zoológico o biológico, le informaría que los perros (Canis lupus familiaris) son mamíferos domésticos que pertenecen a la familia Canidae.
Sin embargo, en el campo médico, a veces se hace referencia al término "perro de caza" o "nariz" en relación con los entrenamientos de animales para detectar sustancias químicas, como explosivos o drogas, mediante su agudo sentido del olfato.
Si tuvo la intención de preguntar sobre algo diferente, por favor, proporcione más detalles para que pueda ayudarlo mejor.
El segundo trimestre del embarazo se define en términos médicos como el período que transcurre desde la semana 13 hasta la semana 26 o 27 de gestación. Durante este tiempo, la mayoría de las mujeres embarazadas experimentan una mejora en los síntomas relacionados con el embarazo. Los riesgos de aborto espontáneo y otras complicaciones tempranas disminuyen significativamente.
En cuanto al desarrollo fetal, durante el segundo trimestre se forman y maduran muchos órganos y sistemas importantes. Por ejemplo, los músculos y huesos del feto se fortalecen, y él o ella comenzará a moverse y dar patadas con más frecuencia. El feto también desarrolla sus sentidos del gusto, tacto y audición en este momento. Además, el bebé empieza a producir su propio suministro de surfactante, una sustancia necesaria para la correcta función pulmonar después del nacimiento.
También es durante el segundo trimestre cuando generalmente se realiza la ecografía detallada, que permite evaluar el crecimiento y desarrollo fetal, así como determinar el sexo del bebé si los padres desean saberlo.
Lo siento, hay alguna confusión en su consulta. La palabra "gatos" generalmente se refiere a los animales domésticos del género Felis. Sin embargo, si está utilizando la palabra como un acrónimo médico, necesitaría especificar qué quiere decir porque los acrónimos pueden representar diferentes cosas en el campo médico.
Si usted está preguntando sobre una afección médica que involucre al gato (el animal), podría haber varias condiciones médicas que afectan a este animal, como la enfermedad renal crónica en gatos, el virus de la leucemia felina, el virus de la inmunodeficiencia felina, etc.
Si tiene una pregunta específica sobre alguna afección médica o si quiere decir algo diferente con 'GATOS', por favor, proporcione más contexto o clarifique su consulta.
Las arterias cerebrales se refieren a un grupo de vasos sanguíneos que suministran sangre oxigenada al cerebro. Hay dos grupos principales de arterias cerebrales: las arterias cerebrales anteriores, medias y posteriores, que se originan en la arteria carótida interna, y las arterias vertebrales y basilar, que se unen para formar la arteria cerebral posterior.
Estas arterias se dividen en ramas más pequeñas que suministran sangre a diferentes partes del cerebro, incluyendo el córtex cerebral, el tálamo, el hipocampo y el cerebelo. La disfunción o daño en estas arterias puede resultar en una variedad de condiciones neurológicas, como accidente cerebrovascular, aneurismas y demencia vascular.
Es importante mantener la salud de las arterias cerebrales a través de hábitos de vida saludables, como una dieta equilibrada, ejercicio regular y el control de factores de riesgo cardiovascular, como la hipertensión arterial y la diabetes.
No hay una definición médica específica para "conejos". Los conejos son animales pertenecientes a la familia Leporidae, que también incluye a los liebres. Aunque en ocasiones se utilizan como mascotas, no hay una definición médica asociada con ellos.
Sin embargo, en un contexto zoológico o veterinario, el término "conejos" podría referirse al estudio de su anatomía, fisiología, comportamiento y cuidados de salud. Algunos médicos especializados en animales exóticos pueden estar familiarizados con la atención médica de los conejos como mascotas. En este contexto, los problemas de salud comunes en los conejos incluyen enfermedades dentales, trastornos gastrointestinales y parásitos.
La microscopía electrónica es una técnica de microscopía que utiliza un haz electrónico en lugar de la luz visible para iluminar el espécimen y obtener imágenes ampliadas. Los electrones tienen longitudes de onda mucho más cortas que los fotones, permitiendo una resolución mucho mayor y, por lo tanto, la visualización de detalles más finos. Existen varios tipos de microscopía electrónica, incluyendo la microscopía electrónica de transmisión (TEM), la microscopía electrónica de barrido (SEM) y la microscopía electrónica de efecto de túnel (STM). Estos instrumentos se utilizan en diversas aplicaciones biomédicas, como la investigación celular y molecular, el análisis de tejidos y la caracterización de materiales biológicos.
El encéfalo, en términos médicos, se refiere a la estructura más grande y complexa del sistema nervioso central. Consiste en el cerebro, el cerebelo y el tronco del encéfalo. El encéfalo es responsable de procesar las señales nerviosas, controlar las funciones vitales como la respiración y el latido del corazón, y gestionar las respuestas emocionales, el pensamiento, la memoria y el aprendizaje. Está protegido por el cráneo y recubierto por tres membranas llamadas meninges. El encéfalo está compuesto por billones de neuronas interconectadas y células gliales, que together forman los tejidos grises y blancos del encéfalo. La sangre suministra oxígeno y nutrientes a través de una red de vasos sanguíneos intrincados. Cualquier daño o trastorno en el encéfalo puede afectar significativamente la salud y el bienestar general de un individuo.
No existe una definición médica específica para "Enciclopedias como Asunto" ya que esta frase parece ser una expresión coloquial o un título en lugar de un término médico. Sin embargo, si nos referimos al término "enciclopedia" desde un punto de vista educativo o del conocimiento, podríamos decir que se trata de una obra de consulta que contiene información sistemática sobre diversas áreas del conocimiento, organizadas alfabética o temáticamente.
Si "Enciclopedias como Asunto" se refiere a un asunto médico en particular, podría interpretarse como el estudio o la investigación de diferentes aspectos relacionados con las enciclopedias médicas, como su historia, desarrollo, contenido, estructura, impacto en la práctica clínica y la educación médica, entre otros.
Sin un contexto más específico, es difícil proporcionar una definición médica precisa de "Enciclopedias como Asunto".
Las meninges son membranas protectoras del sistema nervioso central en los humanos y otros animales. Ellas recubren el cerebro y la médula espinal desde el interior del cráneo y la columna vertebral. Hay tres capas de meninges: la duramadre (la más externa y resistente), la aracnoides (la intermedia) y la piamadre (la más interna, que está en contacto directo con el tejido cerebral). Estas membranas ayudan a proteger el sistema nervioso central de lesiones y infecciones, proporcionan un suministro de sangre a través de vasos sanguíneos y contienen líquido cefalorraquídeo, que actúa como amortiguador y facilita la circulación de nutrientes y desechos.
La Medicina Naval es una subespecialidad de la medicina que se ocupa de prestar atención sanitaria a los miembros de las fuerzas navales. Esto incluye el cuidado preventivo, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades y lesiones, así como la promoción de la salud y el bienestar general de los marineros, soldados y aviadores navales.
La práctica de la Medicina Naval puede implicar trabajar en una variedad de entornos, desde buques de guerra y submarinos hasta bases navales y hospitales militares. Los médicos navales pueden especializarse en áreas como medicina de emergencia, medicina tropical, medicina hiperbárica, medicina aeronáutica o salud pública y medio ambiente.
Además de proporcionar atención médica directa, los médicos navales también pueden desempeñar funciones importantes en la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías y procedimientos médicos que puedan ser útiles en el entorno naval. También pueden participar en misiones humanitarias y de socorro en casos de desastre, tanto a nivel nacional como internacional.
La habénula, también conocida como el cuerpo nucal o nucleus habitans, es un pequeño grupo de neuronas situadas en la región posterior del tegmento mesencefálico en el cerebro. Forma parte del sistema epitálamo-hipotalámico y desempeña un papel importante en los mecanismos de control de las emociones, la cognición y los procesos homeostáticos relacionados con el sueño y la vigilia.
La habénula está involucrada en la modulación del dolor, la recompensa y la adicción, así como en la regulación de las respuestas neuroendocrinas y autonómicas al estrés y otras demandas internas y externas. La información sensorial y emocional llega a la habénula a través de diversos circuitos neurales, incluyendo el sistema límbico y los sistemas de recompensa y refuerzo.
La estimulación o lesión de la habénula ha demostrado tener efectos significativos en una variedad de comportamientos y procesos fisiológicos, como el estado de ánimo, la motivación, el sueño y la respuesta al estrés. Además, la habénula se ha relacionado con diversas afecciones neurológicas y psiquiátricas, como la depresión, la ansiedad y los trastornos de la personalidad.
Lo siento, pero "gasolina" no es un término médico. La gasolina es un término utilizado en la industria del transporte y la ingeniería mecánica para referirse a un líquido inflamable, compuesto principalmente de hidrocarburos, que se utiliza como combustible en los motores de combustión interna. Si está buscando información sobre algún término médico específico, estoy aquí para ayudarlo. Por favor, verifique el término correcto o pregúnteme si tiene dudas sobre algún concepto médico.