Cuando tenía 8 años, sufrí un acto de pedofilia por un individuo de unos 25 años de edad.
Ese acto me ha marcado para toda la vida, ( ahora tengo 70 ) y aunque he olvidado su rostro, jamás olvidé su cruel acción porque yo era un niño inocente.
Jamás lo conté a mis padres y de vez en cuando a pesar de los años pasados, recuerdo su nombre y mi deseo de venganza sigue latente..
Por eso odio a los pedófilos, pederastas o como quiera que se llamen y que tengan suerte de no caer uno en mis manos.